El aguante de Boca pudo más que el juego de Cruzeiro

Eliminó a Cruzeiro de visitante y voverá a cruzarse con otro brasileño en la llave de semifinales

Clasificó a lo Boca. No hay otra.

El equipo de Barros Schelotto, que venía de sufrir dos duros golpes en diferentes competencias de Argentina, alcanzó un fuerte impacto anoche en Belo Horizonte al eliminar a Cruzeiro y meterse entre los cuatro mejores de América.

Los bosteros perdieron 1 a 0 ante el mejor equiipo de Belo Horizonte, pero se apoyaron en el resultado logrado en el choque de ida (2 a 0 a favor) para volver la clasificación a su favor.

Con Pablo Pérez como amo y patrón de la mitad de la cancha, y los colombianos Villa y Barrios desbordando y cortando en momentos claves, el equipo argentino pudo pararse de igual a igual, ante la fuerte embestida de Cruzeiro, que tuvo el apoyo de más de 70 torcedores en el mítico Mineirao.

Algunos fallos polémicos dentro de las dos áreas le pusieron un marco de suspenso al encuentro, que estuvo sumergido en la tensión de los jugadores para no equivocarse.

Los arqueros Fabio y Rossi respondieron cuando los exigieron y el árbitro uruguayo dirigió como un niño dormido en la “cuna”. Tanto fue así que además de no cobrarle un penal a Villa, le anuló un gol a Cruzeiro sobre el final del primer tiempo y no le cobró otro claro penal por no entenderse a tiempo con su colaborador asistente número 1.

Con escasas apariciones de Villa y Zárate, Boca se resignó a jugar de contragolpe, sufrir el partido y aguantar el resultado en los últimos minutos del partido, después de que Cruzeiro lograse descontar con un remate de Sassa, quien entró a los once minutos y marcó un gol a los doce.


El esfuerzo tuvo correlato con la experiencia y el oficio volcado al fin de la causa sobre el final del partido, con las intervenciones de Gago, Pérez y Zárate corriendo y presionando ante la desesperación de los brasileños.


Ya en tiempo de descuento, Pavón encontró espacios para desbordar al lateral y definió al primer palo sellando el empate y la clasificación.


Ahora, Boca deberá medirse con el Palmeiras, y después de muchos años habrá cruces de un argentino y un brasileño en ambas llaves de semifinales.