Kardashian, West y la hora del divorcio
El cantante recibió el telegrama que anuncia su inminente divorcio.
En 2021 se cumplen cuatro décadas de una serie que marcó una época y que supo mantener en vilo a los televidentes de todo el mundo.
22/02/2021 - 00:00hs
Nada haría suponer a Richard y Esther Shapiro, guionistas de Ruta 66, Bonanza y Tarzán, que, al crear esta soap opera para el horario central de la televisión americana, además sentarían las bases de la cultura popular de los años 80, cuando Dinastía, la serie que desnudaba las disputas dentro de una familia petrolera, impulsaría los ratings de TV en todo el mundo.
Claro que eran otros tiempos, sin plataformas, ni redes sociales, pero la ficción, protagonizada por un multiestelar elenco que incluyó a John Forsythe, Linda Evans, Joan Collins, Pamela Bellwood y Pamela Sue Martin, supo convertirse en un suceso.
Esto fue gracias a que además de intriga, disputas y derivados de las relaciones entre sus protagonistas, temas como la homosexualidad, el aborto, la violencia de género y trastornos psiquiátricos fueron claves en esta teleserie masiva.
Durante nueve temporadas y 224 episodios, muestra la batalla entre Blake Carrington (Forsythe), un empresario petrolero recientemente casado con Krystle (Evans), una mujer mucho más joven que él, quien generará conflicto dentro y fuera de su familia. Se siguen las desventuras de un exempleado de Blake, de nombre Matthew (Bo Hopkins), quien había mantenido una relación extramatrimonial con Krystle, que decidirá hundirlo.
En la segunda temporada ingresará la exmujer de Carrington, la malvada y sombría Alexis (Collins), quien se casa con un empresario contrincante de la dinastía Carrington, sólo para molestar a su expareja.
Así, a partir del ingreso de este personaje, el programa anduvo a paso firme con una innumerable cantidad de situaciones que lograron mantener la tensión entre temporadas, con gloriosos cliffhangers que buscaban generar la intriga sobre cómo continuaría el relato.
A los peinados majestuosos de sus protagonistas femeninas, el exceso de brillos y sobreactuaciones, lujosos vestuarios y escenarios, se sumaban las peleas entre Krystle y Alexis; aportaban no solo humor y tensión, sino principalmente un tono kitch a una emblemática serie, que empoderó a las mujeres de la ficción. Tuvo varios spinoff, como Los Colby, Dinasty: the reunión y una reciente adaptación de CW con el glamour y tono original de la saga.