Meghan Markle y el príncipe Harry esperan su segundo hijo
La noticia llegó acompañada de una foto donde la duquesa luce su embarazo.
Su particular mirada y profesionalismo lo posicionaron como un referente de las producciones fotográficas. Ahora imagina, crea y produce universos mágicos para sus películas, con elencos increíbles.
16/02/2021 - 00:00hs
El reconocido fotógrafo de las estrellas, José Cicala, despliega su pasión por el cine dirigiendo sus propias películas. Diario Hoy se acercó al set de John Lennons, su nueva propuesta, una delirante comedia enmarcada en los años 80, con un elenco encabezado por Gastón Pauls.
—Estás rodando una nueva película y tenés pendientes de estreno los filmes Sola, con Araceli González, y La sombra del gato, con Danny Trejo ¿cuándo las veremos?
—Un año complicado el que pasó. Viste que las dos las filmé, no juntas, pero con muy poco tiempo entre sí. Después tuve que dividirme el tiempo para la postproducción y tardé tiempo en decidir muchas cosas del proceso que para mí son superimportantes, como la música. De hecho La sombra… tiene 38 temas. También trabajé mucho en la post de color y la de efectos. Esto lo hice en 2019 y 2020, las tengo listas, pero estamos esperando un poco.
—¿Que abran los cines?
—Esperando el cine. Pero no sé si puedo seguir esperando mucho más, porque las quiero soltar. Pero es una época de especular cosas. No es una decisión mía.
—Y en el medio de todo eso, John Lennons ¿la ibas a arrancar en mayo de 2020 no?
—Sí, mayo, junio, pero la pandemia lo demoró; y si bien me siento cómodo, monitoreando todo de manera remota, me molesta cuando quiero expresar a los actores algunos puntos. Entiendo que tienen que ver mi cara para las indicaciones, y tengo que decir “te estoy sonriendo”, porque si no es un tema. Me voy adaptando. Ya sabés que vienen a sanitizar y esperás el proceso.
—Es importante mantener los protocolos y la higiene del lugar…
—Es fundamental para culminar las cuatro semanas de rodaje, se enferma cualquiera y se complica. Nos cuidamos entre todos, es superimportante, no armamos una burbuja pero estamos controlados. Todos los lunes hay hisopados, y las participaciones de los que se suman también. Hay un tema con los extras, que en algunas ocasiones no los puedo utilizar porque las locaciones permiten hasta determinada cantidad de gente y tenés que decir: “Salgan cinco de cámaras o de luces y entren cinco extras”. Tenés que trabajar todo por bloque. Pero te adaptás. Por suerte el equipo y el elenco son increíbles. Al ser una comedia, además, es todo más divertido.
—Hablando con algunos de los actores lo que cuentan es que vienen al set a jugar, a hacer catarsis…
—Claro, hay un poco de eso. Yo digo que salgo a jugar, con mis amigos, a un nivel profesional, y eso te aliviana muchas cosas. De hecho hay veces que tenemos que cortar por el nivel de diversión que se genera.
—Sos un fanático de lo retro, tenés una colección increíble de objetos. Acá unís eso con el pasado y con el ADN del chanta argentino, ¿cómo surgió la idea principal del relato?
—Originalmente se me había ocurrido contarla con Andy Gibb, de los Bee Gees. Y en medio de todo esto, Gabriel Machado le hizo fotos a Javier y me volví loco, era John Lennon.
—Es John Lennon…
—Es increíble, se te pone la piel de gallina cuando lo ves por cámara. Y la idea es un poco analizar cuántas canciones nos perdimos si genios como él hubiesen seguido vivos. Un poco es ese sueño. No puedo contarte el final de la película, pero empieza todo como de chanta argentino, pero a medida que avanza todo, tiene otro tono. Porque el personaje de Pauls, que representa dobles de Sandro para casamientos y cumpleaños de quince, un día se cruza con el doble de Lennon y piensa que se salva y le vende al personaje de Luis Machín, que es como un empresario musical, que Lennon viene a Argentina. Es como cuando Alejandro Romay dijo que iban a venir Los Beatles.
—Sé que sos muy proactivo y seguramente estarás ya imaginando otro proyecto, ¿ibas a hacer algo con Miranda Otto, verdad?
—Sí, tiene muchas ganas de venir a hacer una película y Michael Madsen, también. La representante de Dany Trejo es la de él también, y cuando vio La sombra… terminada, automáticamente me ofreció a Michael. A mí me encanta, está en todas las películas de Quentin Tarantino, me encanta la cara, las miradas que tiene. Y tengo armada una película que se llama La abuela, es terror psicológico puro, con unos nietos que van de visita a la casa de su abuela. El guion está terminado, cerradito.
—Hay que esperar entonces…
—Sí, de hecho Miranda iba a participar de Lennons. Pero por la pandemia no se pudo. Igual te cuento que por esto tengo la suerte de conseguir cosas alucinantes. Por ejemplo, conseguí el Hotel Savoy entero, puedo hacer lo que quiero. Trabajé en La Usina del Arte tres días, increíble, porque no hay eventos ahí. Me estoy dando muchos gustos y tengo que aprovechar, porque en otro contexto no podría hacerlo.