¿Y el anillo para cuándo?

Jennifer López y su prometido, el exdeportista Alex Rodríguez, están comprometidos bajo el mismo techo. Sin embargo, pospusieron su boda. Primero, por una infidelidad pasada y ahora, por la pandemia imperante.

Gracias a su talento, Jennifer López se convirtió en una artista latina que cosechó su siembra en el séptimo arte, a través de su música en escenarios internacionales. Asimismo se desempeña como actriz en proyectos para la pantalla chica.

Desde siempre, el costado sentimental de la mujer es el foco de interés mediático que, desde hace unos años, está comprometida con el exdeportista Alex Rodríguez. Este amor transcurrió con normalidad, convivieron bajo el mismo techo y tenían planes para caminar con rumbo al Registro Civil y el altar respectivamente.

Sin embargo, el muchacho tuvo una aventura amorosa con una joven reportera y el casamiento quedó guardado en el freezer cuando trascendió la noticia. En este sentido, López le pidió un tiempo a su pareja para pensar en soledad la decisión que tomaría al respecto refugiándose en el amor de sus hijos y seres queridos mientras se abocaba a la producción de sus canciones.

Una vez que su corazón sanó, ella lo convocó para una charla sincera y logró perdonarle el desliz. En esta segunda oportunidad, los tortolitos redujeron los compromisos de sus abultadas agendas de forma considerable para darle rienda suelta a su lazo sentimental.

A inicios del verano anunciaron su boda para mil personas pero el surgimiento de la afección coronavirus declarada pandemia por su propagación por todo el universo volvió a posponer la planificación matrimonial que estaría llevándose a cabo por estos días.

De esta manera, la crisis sanitaria que requiere el confinamiento obligatorio llegó para quedarse hasta nuevo aviso, por lo que JLO pospuso su compromiso y aú no fijó otra fecha. Ahora, concedió una entrevista donde expresó que su entusiasmo ya no existe mientras que tiene sentimientos encontrados con esta situación.

En este contexto, afirmó: “Mi corazón está un poco roto porque tenía grandes planes para mi ansiada boda, pero a la vez también me digo que Dios debe tener un plan más grande para mí, lleno de sorpresas, así que tampoco está tan mal que tengamos que esperar y ver qué ocurre. Tengo que creer que va a ser así. Pero de momento no estamos planeando nada. Lo mejor es tomárselo con paciencia hasta que sepamos qué va a ocurrir”.

Por último, la mujer recordó que aceptó compromisos intensos. Hizo una participación en el Súper Bowl para luego rodar una película con el fin de tener tiempo libre, que llegó de forma abrupta con la cuarentena. Ahora solo resta esperar y quedarse en su casa rodeada de seres queridos.  

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