El vandalismo y el abandono ponen en riesgo la seguridad de los niños

Cuando el sol comienza a bajar y los chicos salen de la pileta, una alternativa simple y económica para salir de casa es jugar en el parque o la plaza del barrio. Sin embargo, en el último tiempo esta opción no está exenta de peligros, ya que el deterioro, producto del uso y del vandalismo en algunos espacios públicos como el Parque San Martín (que va desde 23 a 27 y de 50 a 54) y la Plaza Belgrano (ubicada en 13 y 40), hace que tanto grandes como chicos tengan que estar atentos, viendo por dónde circulan. 

En el Parque San Martín, un pozo de un metro de diámetro se encuentra destapado y dos vallas impiden el acceso de forma precaria. Los baños están inutilizables y dos hamacas de uno de los sectores de juegos penden de una cadena. 

Mónica Solano, vecina de 50 entre 29 y 30, expresó ante este medio que “en los últimos dos meses se ha venido abajo el parque”, además se quejó porque al manifestarle su preocupación a los agentes de la Policía Local por los juegos rotos le respondieron que “vuelva mañana”. 

En Plaza Belgrano, el panorama es similar: pueden verse toboganes gastados al punto de agujerearse, escombros desparramados y columnas de iluminación atadas con cintas plásticas para evitar que se desmoronen.

Disputa vecinal por un tilo en diagonal 74

Paula Herrera, comerciante de la zona de diagonal 74 entre 8 y 9, se comunicó preocupada con la redacción de diario Hoy por la posibilidad de que la administradora del edificio vecino mande a talar un tilo de la vereda. “Un día le puso un cartel que decía: Este árbol es el que debe extraer la Municipalidad para continuar con la refacción de la vereda”, expresó la mujer. Además, agregó: “Somos ecologistas proteccionistas y nos parece arbitrario que un privado disponga del patrimonio ecológico de la ciudad”.

Ante la consulta de este medio, el secretario de Espacios Públicos de la Municipalidad, Marcelo Leguizamón, explicó que para sacar un árbol primero “se hace la inspección con las ingenieras agrónomas y ellas deciden si es necesario”. “A veces las raíces rompen la vereda pero eso no significa que el Municipio autorice su extracción”, agregó el funcionario. 

En cuanto a este tilo en particular, Leguizamón informó que “no tiene expediente iniciado”.