Bolsonaro advirtió que si se extienden las cuarentenas podrían haber saqueos
En medio del colapso del sistema de salud y la reaparición del líder opositor, Lula da Silva, Jair Bolsonaro dijo que las cuarentenas podrían llevar a un crisis social.
Bolsonaro lanzó esta advertencia al comentar el toque de queda en el Distrito Federal de Brasilia y en el estado de San Pablo, que pretende retirar de circulación por dos semanas a 4 millones de personas para evitar un colapso en el sistema hospitalario que ya está ocupado al 87%.
"¿Hasta cuando resistirá nuestra economía? Porque si colapsa, será un desgracia. Podremos tener en breve invasión a supermercados, prenderán fuego a los colectivos, huelgas, piquetes, cortes de ruta. ¿Adónde vamos a llegar?'", afirmó el mandatario, al lado del ministro de Economía, Paulo Guedes.
Mientras el Gobierno espera que el Congreso apruebe un nuevo subsidio por cuatro meses a la población más vulnerable, el récord de muertos por la pandemia, se suma el colapso en general en gran parte del país y el regreso de Lula se ha sentido en el oficialismo.
A tal punto que la reaparición de Lula el miércoles permitió cerrar filas con Bolsonaro al díscolo vicepresidente Hamilton Mourao, general retirado que admitió que se ha politizado el combate a la pandemia y afirmó que el líder de PT "está viejo" y que si se presenta en 2022 "perderá las elecciones".
"Nosotros somos digitales y Lula es analógico", afirmó Mourao, quien admitió podría no formar parte de la fórmula con Bolsonaro para la relección el año que viene.
Lula, líder del Partido de los Trabajadores y expresidente entre 2003 y 2010, recuperó el lunes sus derechos políticos para ser candidato en octubre del 2022 luego que un juez de la corte suprema anulara dos sentencias en su contra por incompetencia del exjuez de Lava Jato, Sérgio Moro.
Una encuesta del Instituto Atlas divulgada por la versión brasileña del diario español El País indicó que el 60% de la población rechaza la forma de gobernar de Bolsonaro y que el actual presidente perdería en una segunda vuelta contra Lula, contra su exministro de Salud Luiz Mandetta, contra Fernando Haddad y contra el laborista Ciro Gomes.
Es la primera vez que la encuesta muestra a Bolsonaro derrotado en segunda vuelta y coloca a Mandetta, del conservador Demócratas, primer ministro de Salud del Gobierno actual, como favorito incluso antes que Lula.
La prensa económica, por su parte, destacó que los mercados no expresaron preocupación por Lula, quien hizo un discurso moderado y se dispuso a hablar con el empresariado.
El discurso a favor de la vacuna de Lula, destacado por los medios que siempre le fueron hostiles y alineados a la Operación Lava Jato que lo encarceló, provocó un ruido en el bolsonarismo, que lanzó una campaña en las redes para decir que "la mejor arma de Bolsonaro es la vacuna".
El vicepresidente Mourao dijo que no le preocupa la posibilidad de una posible candidatura del expresidente Lula a las elecciones de 2022 y consideró "difícil" que pueda volver a gobernar.
"El pueblo es soberano. Si la gente quiere el regreso de Lula, que tenga paciencia. Lo encuentro difícil", subrayó.
"En cuanto al expresidente Lula, ni me preocupo. Pueden anular el proceso, pueden cambiar al juez de fuero, pero una cosa tengo clara, el expresidente Lula fue condenado en tres instancias", concluyó.