Se trata de los aceleradores de la primera etapa del Larga Marcha que lanzó la nave tripulada Shenzou 12 el pasado 17 de junio.
El pasado 17 de junio, China lanzó al espacio la nave tripulada Shenzou 12 a su estación espacial en construcción. Era la primera vez desde 2016 que el gigante asiático enviaba taikonautas al espacio.
El hito fue celebrado por los ingenieros y científicos de todo el mundo pero, al poco andar, un hecho llenó de desazón, indignación y enojo a la comunidad científica.
Unas imágenes recientemente liberadas, volvió a poner en relieve la dudosa política de tratamiento de residuos espaciales de China.
Las imágenes muestran los aceleradores de la primera etapa del cohete Larga Marcha que cayeron directamente sobre una autopista civil.
El problema no es solo el riesgo de un incendio o la destrucción que podría causar parte del vector al caer e impactar contra una casa o una persona, sino también los gases altamente tóxicos que libera.
El combustible de los Larga Marcha pueden causar cáncer y envenenamiento, no solo en humanos, sino en la fauna local.
De más está decir que el lanzamiento del pasado 29 de abril, donde se puso en órbita el primer módulo de la Estación Espacial China, mantuvo en vilo al mundo por un fragmento que comenzó a caer sin control.