En África hay más de 21.000 niños reclutados

Miles de chicos están siendo utilizados por grupos armados para participar en conflictos internos dentro del continente, siendo así la región con el mayor número de violaciones a los derechos del niño.

La ONU, en conjunto con Unicef, publicó un informe en las últimas horas que detalla la gravedad de la situación actual de los menores de edad en África. Durante los últimos cinco años, la región ha registrado sistemáticamente el mayor número de violaciones graves de los derechos del niño verificadas por las Naciones Unidas. En total más de 21.000 infantes se encuentran reclutados y siendo utilizados por las Fuerzas Armadas locales y por grupos armados. Al mismo tiempo, más de 3.500 fueron secuestrados y más de 2.200 padecieron violencia sexual. África Occidental y Central, además de ser la región con más chicos reclutados, también es la segunda con el número más alto de secuestros.

“Ya sea que los niños de África occidental y central sean objetivos directos o víctimas colaterales, están atrapados en zonas de conflicto, enfrentados a la violencia y la inseguridad. Las violaciones graves de sus derechos perpetradas por las partes en un conflicto son inaceptables. Tienen un impacto negativo en su capacidad para aprender, trabajar, construir relaciones personales y contribuir al de­sarrollo de sus comunidades y países. Unicef insta a todas las partes en los conflictos de la región a prevenir y poner fin a las violaciones graves contra los niños y garantizar que todos los perpetradores rindan cuentas”, sostuvo al respecto de la sensible situación la drectora regional de Unicef para África occidental y central, Marie-Pierre Poirier.

Desde el año 2005, una de cada cuatro violaciones graves se ha cometido en esta parte del mundo. Solo en el último año, más de 6.400 niños, donde el 32% son niñas, fueron víctimas de una o más de estas situaciones graves en la región. “Siguen desarrollándose importantes crisis humanitarias en África occidental y central. La situación en Camerún, la República Centroafricana y la República Democrática del Congo, y las emergencias en varios países, incluidas las crisis en el Sahel Central y la región de la cuenca del lago Chad, están teniendo consecuencias devastadoras para los chicos y las comunidades. Con el recrudecimiento del conflicto armado y la pandemia de Covid-19, 57.5 millones de niños en África Occidental y Central necesitan

asistencia humanitaria, una cifra que casi se ha duplicado desde el año 2020”, explica el documento.

Ante esta situación, Unicef ha buscado cubrir ciertas necesidades básicas insatisfechas, colaborando así con diversos organismos y entidades locales. Así, desde el 2015 más de 4.3 millones de menores de edad se han beneficiado de apoyo psicosocial y de salud mental, más de 52.000, asociados con fuerzas y grupos armados, han recibido apoyo para su reintegración en su comunidad, y casi 65.000 chicos fueron ayudados a encontrarse y reunirse con sus familias. Por último, cerca de 183.000 mujeres, niñas y niños se han beneficiado de intervenciones para prevenir y responder a la violencia de género, incluidos servicios de gestión de casos, asistencia jurídica, atención médica, protección, educación y habilidades para la vida.

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