Macron advierte que en 2027 podría sucederlo Marine Le Pen

E++l presidente francés Emmanuel Macron advirtió sobre una eventual llegada al poder en 2027 de la líder de ultraderecha Marine Le Pen si su gobierno no encuentra cómo responder los desafíos y sugirió que debería haberse implicado más en explicar su impopular reforma de las pensiones a los ciudadanos.

“Marine Le Pen llegará al poder si no sabemos cómo responder a los desafíos del país y si desarrollamos el hábito de mentir o negar la realidad”, dijo Macron en una entrevista con el periódico Le Parisien.

Le Pen aparece como la principal beneficiada del torbellino desa­tado en Francia por la decisión del actual mandatario de aumentar la edad de jubilación, que impuso finalmente por decreto al no reunir los respaldos parlamentarios y los años de cotizaciones necesarios, lo cual dio lugar a tres meses de protestas y huelgas.

A fines de marzo, Le Pen anunció que no quería ser la primera ministra de Francia, pero no descartó la posibilidad de postularse a la presidencia del país por cuarta vez en 2027.

Según una encuesta de Elabe publicada a principios de abril, si se celebrasen unas elecciones en este momento, la líder de ultraderecha superaría al jefe de Estado en el número de votos.

Dos tercios de los votantes están en contra del incremento de la edad de jubilación de los 62 a los 64 años, según los sondeos, y de elevar a 43 los años de aportes para disponer de una pensión completa.

La medida no parecía contar con la aprobación de una mayoría de los diputados cuando el gobierno decidió recurrir al artículo 49.3 de la Constitución para sacarla adelante.

Desde principios de año, Macron ha mantenido un perfil bajo, dejando a su primera ministra, Élisabeth Borne, lidiar con las críticas a la reforma.

“Quizá el error fue no estar lo suficientemente presente para dar sustancia a la reforma y sacarla adelante yo mismo”, añadió el presidente, precisando que todavía tiene “confianza” en Borne.

Tras promulgar la ley a principios de este mes, emprendió una gira por Francia para acercarse a los ciudadanos del este y del sur del país, donde fue abucheado. Manifestantes enojados lo persiguieron, tanto a él como a sus ministros, protagonizando cacerolazos para manifestar su descontento.