Insalubre y peligroso silencio de Julio Garro y Darío Alfano

Una semana ya ha pasado desde que el intendente Julio Garro retomó sus funciones como jefe comunal luego de haber estado tres semanas de licencia, otorgada por parte del Concejo Deliberante de La Plata.

Este lunes, al igual que cada día de la semana anterior, Diario Hoy se hizo presente nuevamente en el Palacio Municipal a la espera de que el intendente de la ciudad se exprese en relación a su participación en la mesa judicial y política macrista que tenía como finalidad determinar causas para meter presos a sindicalistas. Hecho que ocurrió, por ejemplo, con el caso del Pata Medina pero que viene a colación a otros casos significativos como los del Caballo Suárez y también la situación que involucra al ingeniero Marcelo Balcedo.

En cuanto a la actividad diaria de Garro, hay dos versiones. Por un lado, uno de sus voceros, Martín Musciatti, quien asegura que el intendente está en un almuerzo en Buenos Aires.

La otra versión, de otro funcionario, Facundo Bonetto, uno de los hombres de extrema confianza de Garro, dijo que está presente en su despacho, recorriendo los pasillos de la Municipalidad de La Plata.

Todo esto ocurre en el contexto de un mes en el cual los empleados municipales se vieron afectados por la ola de coronavirus y en muchos casos tuvieron que pedir licencia. Esto repercutió en el servicio de recolección, en el servicio de limpieza por parte de los cooperativistas, que no dieron abasto en la zona sur de la ciudad.

Dichos empleados responden al sindicato de empleados municipales de Darío Alfano, que hasta el momento tampoco se ha expresado en relación a la “Gestapo sindical”. ¿Acaso él es es un sindicalista con un cheque en blanco con un crédito abierto para evitar ser perseguido porque comulga con el gobierno de Garro?

Diario Hoy junto a la Red 92 continúa buscando respuesta, dándole crédito tanto al intendente como al representante de los trabajadores del municipio para que se puedan defender y dar su versión de los hechos. Para que puedan no quedan en una misma bolsa como otros funcionarios políticos que atentaron contra la democracia.