IOMA: allanamientos en Junín confirman la red de corrupción

La Justicia ordenó allanar la sede de la obra social y la vivienda de un ex director del instituto. El principal acusado reporta al titular de UPCN, Carlos Quintana, y es secretario zonal de ese gremio. Varios exfuncionarios en la mira.  Investigan millonarios pagos por prestaciones que nunca se realizaron

Tras varias denuncias de afiliados y profesionales que trabajan en el IOMA, la justicia de Junín ordenó anoche que se allane la sede de la obra social en esa localidad y la vivienda del secretario zonal de UPCN, quien a su vez cumple funciones de delegado en la obra social y fue director regional durante seis meses. Los procedimientos fueron realizados por personal de la Policía Federal.

Los detectives irrumpieron en el edificio de Quintana y la avenida San Martín de Junín. Secuestraron documentos, libros y otros elementos de interés para la causa. Además, aunque anoche no fue confirmado oficialmente, el dirigente de UPCN denunciado, identificado como Eugenio Pirani, habría sido demorado.

La denuncia que dio origen al procedimiento fue realizada por el titular de la Asociación de Profesionales del IOMA, Idelmar Seillant. Según trascendió, están imputados  directivos de la obra social mencionada y representantes de empresas prestatarias por los delitos de asociación ilícita, estafa y enriquecimiento ilícito, entre otros.

Las empresas en la mira se dedicaban a internaciones domiciliarias, nutrición domiciliaria, tratamiento de kinesiología domiciliaria e internaciones de salud  mental. Entre las irregularidades detectadas aparece la facturación de tratamientos a personas fallecidas y a afiliados que no habían solicitado ninguna prestación.

Asimismo, se investiga si se falsificaba documentación a los efectos de sobrefacturar autorizándose tratamientos y provisiones de alto costo: prótesis, medicación, insumos, sin que lleguen a destino. De acuerdo a la denuncia de Seillant, Pirani respondería directamente al titular de UPCN, Carlos Quintana, y estaría vinculado con la firma Hestia SRL, patrocinante del club Sarmiento de Junín. Una de las titulares de esa sociedad, Miriam Elizabeth Gómez, actuaría como testaferro y mantendría una relación sentimental con el dirigente de UPCN.

Hestia SRL se dedica a ofrecer prestaciones domiciliarias, las que no cumple.  En la denuncia penal, que lleva el número 654/16, consta que entre los servicios y suministros facturados, y nunca efectivizados, en lo que va del año, ya se habrían facturado más de 14 millones de pesos pagados por el IOMA.  “Esta empresa estaría constituida por personas interpuestas, testaferros y familiares de Pirani”, dice la presentación que dio origen a la investigación. Y agrega con el apoyo funcional de quien fuera hasta hace pocas semanas director de la Región Junín del IOMA, Oscar Zazalli, se realizó “un total direccionamiento y se autorizaron prestaciones millonarias para la empresa. Se registraron asociaciones ilícitas y estafas, transformándose en presuntos enriquecimientos personales”.

La denuncian también apunta contra el ex presidente del IOMA Antonio La Scaleia  y el vocal del directorio Luis Pérez, otro representante gremial vinculado a Quintana que aún sigue en funciones en la obra social. “Estos funcionarios son los que aseguraban la cadena de pagos, sin cuestionamientos. Sólo basta con ver los cobros del mes de enero/2016, facturado en diciembre, por $9.800.000. Los funcionarios sabían que se trataba de una empresa constituida por testaferros”, agregaron los denunciantes. 

Funcionario reciclado en el PAMI

También mencionaron que uno de los funcionarios que habría estado al tanto de las maniobras era el entonces director de Gestión Institucional del IOMA, Pablo Germán Avila, quien sospechosamente pasó a desempeñarse como coordinador de la regional platense del PAMI tras el cambio de gobierno el pasado 10 de diciembre. Según la denuncia, Avila y otros integrantes del directorio de la obra social eran los que permitían “con sus acciones  garantizarles impunidad ya que sabían de la constitución de múltiples empresas relacionadas con los funcionarios y representantes del Gremio UPCN”.

De chofer a millonario

Empleados de la obra social comentan que Eugenio Pirani, como empleado del IOMA,  pasó de ser chofer de una camioneta a jefe de departamento. Es más, hasta llegó a desempeñar durante seis meses el puesto de director de la delegación de Junín.  Actualmente, viviría en un country y las expensas que paga sobrepasa la mitad del salario que recibe por su labor en el IOMA.

Lo ocurrido en Junín solo es una pequeña muestra de la red de corrupción que atraviesa a la principal obra social de la Provincia. Pese a ello, varios funcionarios del IOMA, vinculados a Carlos Quintana, siguen en funciones. Su permanencia no hace más que confirmar que el pacto de impunidad sellado por el gobierno bonaerense y la conducción de UPCN, que aceptó una irrisoria oferta salaria que ni supera el 12%, tiene plena vigencia.

Una entidad en la que pesan 15 causas penales

El Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), la obra social más grande de la provincia de Buenos Aires, se encuentra sumergida en un estado de putrefacción interna muy grande.

Sobre las autoridades del IOMA pesan 15 causas penales, que involucran a integrantes y ex integrantes del directorio del instituto –incluidos los representantes de Suteba y UPCN que conducen los kirchneristas Roberto Baradel y Carlos Quintana- durante la gestión del sciolista Antonio La Scaleia, que están siendo investigados por graves delitos.

Entre las fechorías figuran desde la venta clandestina de medicamentos oncológicos, hasta firmar contratos leoninos para los intereses bonaerenses y pagar escandalosos sobreprecios por prótesis y distintos insumos.

La descomposición del IOMA, denunciada desde hace años desde las páginas de Hoy, dejan en evidencia también un complejo entramado político orquestado entre oficialismo y oposición para garantizar impunidad a los responsables del latrocinio cometido contra sus arcas.

Por el momento, la gobernadora María Eugenia Vidal solo ha decidido dar continuidad a las gestiones anteriores, poniendo al mando a Sergio Cassinotti, exCEO de Unión Personal, la obra social de UPCN.

Esto ha llevado a que los responsables del saqueo a la obra social sigan impunes y muchos de ellos tal como ha destacado Hoy en reiteradas ocasiones, hayan sido premiados con ascensos.