Massa reunió a su tropa bonaerense en medio de la interna
El excandidato presidencial prepara la agenda legislativa de cara al 2026.
La presión de la carne sobre la inflación se sostiene mientras cae el consumo y la producción no logra recomponerse.
14/12/2025 - 00:00hs
El precio de la carne volvió a presionar la inflación de noviembre y consolidó una tendencia que se profundiza desde hace meses. Con ese marco, el consumo interno cayó a cuarenta y nueve kilos por habitante al año, en un escenario marcado por salarios rezagados y una producción que no acompaña el avance de la exportación. El stock ganadero permanece estancado en torno a cincuenta millones de cabezas mientras la población crece, una combinación que tensiona la oferta disponible para el mercado local.
Los valores en el mostrador reflejan esa dinámica. El asado aumentó trece por ciento en un mes y acumula un salto interanual de más de setenta y seis por ciento. La nalga subió más de diez por ciento en noviembre y la carne picada llegó a superar los ocho mil pesos el kilo. En paralelo, los precios en el Mercado de Cañuelas mostraron incrementos que duplican o triplican la inflación anual.
La exportación, por su parte, recuperó ritmo en el tercer trimestre y volvió a disputar cortes que antes se destinaban al consumo interno. Aunque existen diferencias entre animales livianos y pesados, la presión sobre los precios se sostiene en un contexto de menor faena y producción prácticamente estancada. Con un consumo debilitado y un mercado externo que busca más volumen, la carne se convierte en un bien cada vez más difícil de sostener para los hogares.