Industria en retroceso y un modelo económico sin horizonte
La caída industrial refleja un rumbo económico que posterga inversión y derrumba el empleo
Pese a la intervención de Estados Unidos, el dólar pegó otro salto. Hay especulaciones por más restricciones para el acceso a la divisa.
19/10/2025 - 00:00hs
En la última jornada bursátil de la semana, el precio del dólar cerró a $1.491, con una suba de $51. El blue alcanzó los $1.485 y los financieros superaron los $1.500: el MEP cotizó a $1.541 y el CCL a $1.543. De esta manera, la divisa norteamericana rozó el techo de la banda cambiaria.
Lo peor es que la suba persistió a pesar de la intervención de Tesoro de los Estados Unidos, que siguió con la compra de pesos para sostener el precio del dólar en Argentina. Incluso, Scott Bessent publicó un posteo en su cuenta de X antes de la apertura de los mercados, por el cual expresó su apoyo a Argentina, informó sobre la compra de pesos, y lanzó: “Tenemos la capacidad de actuar con flexibilidad y contundencia para estabilizar a Argentina”. Sin embargo, no fue suficiente.
Una de las principales causas de la suba del dólar es que apareció el temor en los operadores bursátiles ante versiones de que se anunciarían medidas durante este fin de semana para restringir la posibilidad de acceder a divisas en la última semana previa a las elecciones legislativas. Cabe recordar que el Gobierno se juega el salvataje de Donald Trump, ya que el propio mandatario estadounidense advirtió que la ayuda financiera está atada a una victoria oficialistas.
Por otra parte, también comienza a percibirse que en el mercado se está realizando un “rulo” al comprar barato cuando hay oferta oficial (del Tesoro argentino o estadounidense) y a vender cuando sube, hasta que aparece de nuevo la intervención para bajar el precio.
“El salvataje del Tesoro estadounidense no logró revertir el clima de desconfianza. La falta de precisiones sobre el acuerdo con EE. UU. y la condicionalidad política expresada por Trump reavivaron la presión cambiaria y la caída de los bonos, mientras el Tesoro argentino debió moderar su estrategia de absorción monetaria”, describió en un informe la consultora Vectorial.
“En paralelo, los datos de actividad confirman una economía recesiva: la utilización de la capacidad instalada industrial se mantiene por debajo del 60%, con destrucción de más de 18 mil unidades productivas y caída del empleo formal desde inicio del mandato”, agregó.
Un gobierno sin poder de fuego
Este viernes también se conoció que el saldo de la cuenta en divisas del Tesoro argentino cayó a 188,2 millones de dólares, el menor valor de todo el año. Esto representa una situación de debilidad para enfrentar los pagos que restan este mes, en noviembre, por más de 1.200 millones de dólares, y en diciembre, por otros 250 millones.
El Tesoro le hizo compras directas al Banco Central la semana pasada por 124 millones de dólares, que utilizó para hacer pagos a los organismos internacionales. E los próximos días tendrá que seguir por ese camino, ya que en la primera semana de noviembre tiene que pagar los intereses al FMI por 852 millones de dólares.
En consecuencia, las reservas internacionales del Banco Central empiezan a reflejar el estrés al que está sometido el Gobierno, con una caída de 533 millones este viernes a 41.168 millones de dólares.