Se perdieron más de 182 mil puestos de trabajo formal durante los siete meses del actual gobierno
Así se informó en el estudio elaborado por el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP) perteneciente a la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires.
La dinámica contractiva del empleo formal se ha venido verificando desde octubre de 2023, acumulando nueve meses de caídas consecutivas. Durante este período el número de asalariados formales se redujo en algo más de 200 mil, representando una disminución de casi 2% respecto del mes de septiembre del año pasado.
Así se desprende del informe coordinado por Roxana Maurizio y Luis Beccaria y elaborado por el Área de Empleo, Distribución e Instituciones Laborales (EDIL), perteneciente al Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP).
En junio 10,14 millones de personas eran trabajadores asalariados registrados en la seguridad social, de acuerdo a los datos sin estacionalidad del Sistema integrado Previsional Argentino (SIPA). Ello incluye al empleo asalariado en el sector privado, en el sector público y en casas particulares.
En ese marco, el número de ocupados formales se redujo 0,1% en junio (último dato disponible) con respecto al mes anterior que, en términos absolutos, implicó una caída de alrededor de 12 mil trabajadores.
Alrededor del 35% de esta caída se produjo entre diciembre de 2023 y enero de 2024, cuando se perdieron alrededor de 73 mil posiciones formales asalariadas (-0,7%). Las caídas de los meses siguientes continuaron siendo significativas, aunque disminuyó su intensidad. La contracción fue de 0,3% en marzo, 0,2 en abril y mayo, y 0,1 en junio.
Los investigadores consignan que este retroceso ubica al número de asalariados formales en un valor similar al observado hacia fines de 2022 y es inferior a todos los valores mensuales de 2023.
El informe detalla, además, que la caída del empleo asalariado formal total en junio fue menos intensa que la observada en el empleo asalariado privado debido a la estabilidad del empleo público y de un leve crecimiento del empleo formal en casas particulares.
El salario mínimo siguió perdiendo poder de compra en agosto y ubica este valor entre los más bajos desde enero de 1991. Asimismo, el salario promedio de los trabajadores formales del sector privado no ha logrado volver a los valores de noviembre de 2023.