Despidieron a Sofía, la niña asesinada en General Pico
Los restos de Sofía Milagros Viale, la niña de 12 años que fue encontrada enterrada en una casa de General Pico, fueron despedidos hoy por sus familiares y amigos y trasladados a la parroquia del cementerio de esa ciudad pampeana.
En medio de llantos y dolor, más de un centenar de personas acompañaron a Marcelo Viale y Noemí Ampudia, padres de la nena, en la ceremonia que se realizó en la iglesia, donde el féretro quedará depositado a la espera de que los estudios genéticos confirmen que el cuerpo es el de Sofía.
Es que debido al avanzado estado de putrefacción en que fue encontrado el cadáver, ningún familiar pudo reconocer a la nena, pero como sus pertenencias se encontraron en la casa del principal sospechoso y éste confesó el crimen, se da por descontado que se trata de ella.
Los restos de Sofía fueron velados desde ayer hasta esta mañana en la sala de Corpico, frente al cementerio municipal de General Pico, por donde pasaron vecinos y compañeros de colegio de la menor.
Los padres de Sofía tenían previsto realizar hoy una nueva marcha para repudiar la escasa acción policial y judicial para esclarecer la desaparición de la niña, vista por última vez con vida hace dos meses, pero luego resolvieron suspenderla.
José Luis Janssen (32) declaró el jueves ante la Justicia por la violación y asesinato de Sofía y el abuso sexual de una chica de 14 años cometido el pasado lunes, hecho que permitió descubrir el cuerpo de la primera enterrado la casa del imputado.
Según fuentes judiciales, el acusado confesó la violación y asesinato de Sofía, dijo que los cometió el mismo día que la niña desapareció y brindó detalles del ataque.
"Mientras la violé la ahorqué", confesó Janssen, quien según los voceros nunca mostró arrepentimiento ni lloró y dijo que tras matar a la niña hizo un pozo debajo de la parrilla, tapó el cuerpo con tierra y, como no lo pudo enterrar del todo, lo sacó, profundizó el pozo y volvió a colocarlo.
Luego, detalló que le puso arriba maderas y armó como un corral.
Al ser encontrado, el cuerpo de Sofía estaba sin sus zapatillas, por lo que al ser consultado al respecto, Janssen dijo que las había dejado en el patio de su casa y cuando su pareja le preguntó de quiénes eran él le respondió que se las había dado un hermano, al igual que el carrito en el que Sofía llevaba el pan, que fue hallado en la vivienda.
El acusado también admitió haberse quedado con el teléfono celular de Sofía y con el dinero que llevaba la niña y que usó para comprar droga.
Tras la declaración, el juez de Control de General Pico, Marcelo Pagano, dictó la prisión preventiva de Janssen, por "homicidio agravado criminis causa" (matar para ocultar otro delito, en este caso la violación) por el caso de Sofía, como así también por el "abuso sexual con acceso carnal agravado por el uso de armas" de la adolescente.
Ahora se trata de determinar el rol que cumplió la mujer de Janssen, quien para los investigadores no podía desconocer el hecho.