Abuso sexual: avanza la investigación del Instituto Próvolo

En los próximos días vendrá a la ciudad un hombre que habría sido abusado entre 1982 y 1991 por Nicolás Corradi y otros tres docentes

El fiscal Fernando Cartasegna sigue adelante con la investigación a dos sacerdotes que se desempeñaron en el Instituto Antonio Próvolo para Niños Sordos de La Plata, y que están imputados por la Justicia de Mendoza por presunto abuso sexual y corrupción de menores.

En los próximos días llegará a La Plata Daniel Sgardelis (42), para realizar una denuncia contra Nicolás Corradi y otros tres docentes. Cuando se conoció su caso, Cartasegna inició una investigación de oficio con el fin de llevar a cabo distintos requerimientos, uno de los cuales fue pedir informes al Instituto Próvolo para que aporten información sobre la actuación de los curas.

En la solicitud del informe al monseñor Héctor Aguer, “ellos van a decir cuántos chicos tuvieron a cargo, si hubo denuncias y si intervino algún tribunal eclesiástico”, señaló el fiscal en diálogo con diario Hoy. Además, le pedirá a la Justicia mendocina que le envíe toda la documentación relacionada con la investigación a Horacio Corbacho y Nicolás Corradi, ambos detenidos en esa ciudad, uno de ellos con prisión domiciliaria.

“Aunque no hay una fecha estipulada, se espera que la llegada de Sgardelis sea lo antes posible”, comentó Cartasegna, y agregó que se va a pedir un psicólogo que maneje el lenguaje hipoacúsico para que el denunciante pueda declarar de la mejor manera posible. Su caso se conoció días atrás, cuando acudió al Ministerio de Derecho y Justicia de la Provincia, y a través de Víctimas de Delitos Graves pudo exponer lo que le pasó.

El hombre, oriundo de Tartagal, a través de una intérprete del lenguaje de señas, contó que por su condición de hipoacúsico y al no tener en su ciudad natal dónde instruirse, sus padres lo enviaron a La Plata para que allí realice la primaria. Estuvo en el Instituto 

Próvolo desde 1982 hasta 1991, y fue la peor época de su vida, en la que conoció a Corradi, sacerdote italiano que ahora tiene 82 años. 

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