Caso Heredia: un crimen que permanecerá impune
Un jurado popular declaró “no culpables” a los dos acusados de asesinar al joven en Tolosa. La decisión es inapelable, por lo que los sospechosos quedaron en libertad.
Un jurado compuesto por doce personas sin conocimiento jurídico declaró “no culpables” a Juan Domingo Talerico y Claudio Torres, quienes habían llegado a juicio acusados por el homicidio con arma de fuego contra Miguel Heredia (21), a quien mataron en Tolosa el 13 de marzo de 2018.
Luego de la declaración de los testigos que faltaban, la jueza Carmen Palacios Arias le dio al jurado las últimas instrucciones sobre cómo debían proceder, es decir, decidir solo sobre aquellas pruebas expuestas durante las audiencias llevadas a cabo en la sala de tribunales penales de calles 8 y 56 de nuestra ciudad.
Las doce personas entraron a la sala de deliberación y en no más de media hora obtuvieron el veredicto de no culpabilidad. La única testigo que señaló a Talerico como el autor del suceso fue Dana Córdoba, mientras que todos los demás dijeron que no vieron quién disparó el tiro mortal.
“Es obvio que (quienes fueron a declarar) estuvieron coaccionados”, le dijo a este multimedio una fuente judicial. Durante las sucesivas audiencias, la parte acusadora pidió que Agustín Díaz y Thomás Cafarelli fueran investigados por presunto falso testimonio, ya que contradijeron su declaración inicial durante la etapa de investigación con la información brindada en el juicio. Al principio habían identificado a Talerico como el homicida, pero después dijeron lo contrario.
Al finalizar el debate de ayer, un policía señaló que la familia Heredia “querían ser los dueños del barrio”, por lo cual allegados a la víctima reaccionaron con frases de repudio y se generó tensión en la sala. Por su parte, las familias de los acusados siempre sostuvieron que estos eran inocentes.
Sentencia firme
Cabe recordar que la ley de Juicios por Jurados establece que cuando doce personas, en representación de la ciudadanía, declaran “no culpable” a uno o varios imputados, esa decisión es inapelable, con lo cual la sentencia queda firme. La excepción son los casos en que se observan arbitrariedades, y el fallo puede ser anulado por el Tribunal de Casación bonaerense.
Según la fiscal de instrucción Virginia Bravo, Heredia se encontraba con un grupo de amigos en la esquina de 17 y 525 cuando fue ultimado de un tiro en la frente. Cerca de las 3.50, en el lugar del hecho había entre cinco y seis sujetos, quienes comenzaron a pelear y, en un determinado momento, uno de ellos extrajo un arma y efectuó una serie de disparos, impactando uno de los proyectiles en la cabeza del joven. Este murió dos días después en el hospital San Roque de Gonnet, tras agonizar con muerte cerebral.