Berisso: intentaron incendiarle la casa al acusado de abusar de un menor
Ocurrió en una casa ubicada en la zona de las calles 95 y 129.
Lo determinó la autopsia. Los investigadores están abocados en dar con el responsable, aunque no hay pistas firmes.
01/09/2020 - 00:00hs
Tras la operación de autopsia de rigor, ya que se trató de una muerte traumática, se confirmó ayer que el deceso de Wilmer Malca Vázquez, el hombre de nacionalidad boliviana y 62 años cuyo cuerpo apareció calcinado dentro de un auto incendiado en El Palihue, fue provocado por dos fuertes golpes en su cabeza. Así lo informaron fuentes policiales, a la vez que indicaron que todavía no hay pistas firmes para dar con el o los responsables del asesinato, el número 46 en lo que va del año en la región –elevadísimo número, solo superado por Rosario–.
“Los restos estaban carbonizados entre un 70% y un 80%”, le confió a Trama Urbana un vocero, y añadió que gracias al trabajo de los forenses que llevaron a cabo dicha operación “se pudo establecer que no murió por las quemaduras sino por las lesiones en el cuero cabelludo”. Sentenció que, además de ellas, “no se hallaron más signos de violencia”.
Macabro
Como informó este diario en su edición anterior, un llamado al 911 alrededor de la 1.30 del domingo alertó sobre el incendio de un Renault Logan en 600 entre 1 y 115. Una dotación de bomberos se dirigió al lugar junto a un patrullero y, sofocadas las llamas, se toparon con la dantesca escena.
A través de la patente del vehículo se determinó no solo que no tenía impedimento legal alguno sino que su titular era un sujeto domiciliado en Berisso, por lo que fueron hasta ese domicilio.
Allí una mujer les dijo que había estado con la víctima hasta las 22 del sábado, y corroboró que la ropa que llevaba el cadáver era la misma que tenía el hombre. Dijo, a su vez, que Malca Vázquez había estado involucrado con la comercialización de estupefacientes, y que “había tenido problemas por eso”.
Así, la principal hipótesis está vinculada a un ataque mafioso por el tráfico de drogas, aunque no hay sospechosos a la vista.