Entraderas y casas desvalijadas en otra jornada de terrible inseguridad en La Plata

En uno de los grotescos y graves sucesos, los ladrones se llevaron hasta el portón de un terreno. Ninguno de los atracos dejó personas detenidas.

Múltiples robos en diferentes sectores de La Plata dejaron en manifiesto, una vez más, la inseguridad creciente con la que se vive en La Plata. Como si fuese poco, en ninguno de los casos se logró dar con los implicados, informaron ayer fuentes policiales.

Por un lado, un grupo de delincuentes se acercó durante la noche del sábado, alrededor de las 20, a una casa ubicada en 25 y 494 de Gonnet, aprovechando que la misma estaba vacía ya que sus dueños habían salido.

De acuerdo a los voceros, entraron por el techo para después romper una ventana del baño, todo luego de haber desactivado la alarma de la propiedad. Ya en el interior, recorrieron las instalaciones y se apoderaron de dinero en efectivo, joyas y otros elementos de valor, para después fugarse. Lo llamativo es que los vecinos detectaron lo que sucedía y llamaron al 911, pero ni siquiera así los agentes de la Fuerza pudieron localizar a los malvivientes.

En tanto, a las 21 del viernes tres cacos (armados y con guantes) sorprendieron a un hombre de 60 años, que regresaba a su domicilio en una camioneta Ford EcoSport. Lo obligaron a entrar a la casa de 133 entre 46 y 47, lo maniataron con un cable y golpearon en la cabeza, para huir luego con plata y diversos materiales de interés como cadenas y anillos de oro, un televisor LED, un rifle de aire comprimido y una carabina calibre 22.

Más hechos

Lejos de quedar ahí, una banda integrada por cuatro delincuentes desvalijó una propiedad de San Carlos, cargaron el botín en un auto y se dieron a la fuga. Si bien fueron vistos gracias a una cámara de seguridad en 30 entre 39 y 40, no se los detuvo y permanecen en la clandestinidad.

Por último, otra banda de malvivientes robaron nada menos que el portón de la entrada de un terreno todavía sin construir ubicado en las inmediaciones del predio de Luz y Fuerza, más precisamente en las calles 409 y 115.

Pese a lo grotesco de la situación, consiguieron escapar con rumbo incierto. Los agentes policiales intervinientes no tienen datos para dar con ellos.

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