Golpearon con una muleta a una mujer embarazada durante un robo

Una mujer embarazada y un amigo de su novio fueron las nuevas víctimas que eligieron dos conocidos y peligrosos delincuentes de Tolosa para cometer sus nuevas fechorías. Ambos están involucrados en graves ilícitos, pero hasta el momento no hubo detención alguna, pese a que todos saben quiénes son los implicados.

Fuentes oficiales le contaron a este medio que el primero de los hechos tuvo como damnificada a una joven de 26 años, que cursa un embarazado de 32 semanas. Fue asaltada a punta de pistola por dos ladrones, a plena luz del día (cinco de la tarde) mientras caminaba por las calles 10 entre 529 y 530. Los hampones, fuera de sí, la empujaron, la tiraron al piso y le pegaron patadas, importándoles poco su estado y la vida que lleva dentro. Inclusive uno de los responsables la atacó y la golpeó también con la muleta que tenía. Antes de escaparse, fueron a lo suyo: revisaron las pertenencias que llevaba y le quitaron, así, $5000.

Recuperada del violento incidente, radicó la denuncia en la comisaría Sexta, con jurisdicción en la zona, y ante los oficiales que la atendieron dijo que podía reconocer a uno de los cacos, siendo este un habitual delincuente de la zona.

Nueva víctima

Lejos de conformarse con ese ilícito, los implicados fueron por más y en esta oportunidad escogieron como blanco (causalidad o casualidad, aún no se sabe y se está investigando) a un hombre de 26 años, que acababa de salir de la casa de la pareja de la misma joven.

Fue abordado al día siguiente, a la 1.30, en la intersección de 528 y 11. También a él lo apuntaron con una pistola y le pidieron, bajo tonos amenazantes, la entrega de todo lo que tenía encima. Para que esas palabras ganaran fuerza le pegaron, como en el caso anterior, con una muleta.
El muchacho, indefenso, les dio los $2000 que poseía, y entonces los malhechores se dieron a la fuga con rumbo desconocido.

También aquí intervino la misma seccional policial, donde se abrió un expediente por “robos reiterados”. El último damnificado refirió que es capaz de identificar a uno de sus atacantes, ya que es alguien conocido en el barrio por sus constantes ilícitos.

Como si fuese poco, ante los uniformados que recorrieron el barrio, los vecinos aseguraron que el ladrón es un joven de 22 años que los tiene a maltraer a todos desde hace ya un tiempo.

Pese a contar con esos detalles, tanto él como su cómplice permanecen en la clandestinidad y los frentistas se mostraron, ante este medio, en absoluta alerta y con miedos a nuevos incidentes.