Imputaron a dos médicos por presunta mala praxis

Se trata de un cirujano y un anestesiólogo, acusados de homicidio culposo. La víctima falleció en 2015 tras una segunda operación

El fiscal de la Fiscalía Descentralizada de Brandsen, Mariano Sibuet, imputó a dos médicos de esa localidad por presunta mala praxis. Alejandro César Ambrosini y Gustavo Ariza están acusados de la muerte de una mujer ocurrido en 2015.

Según la investigación del funcionario judicial, el 27 de julio de 2015 alrededor de las 14 horas, en el Instituto Médico de Brandsen, el médico cirujano Ambrosini, y el anestesiólogo Ariza “omitieron agotar los métodos de diagnóstico, a fin de llegar a un examen certero, y consecuentemente brindarle un tratamiento específico de la patología” que padecía la paciente Amanda Medrano.

La mujer había sido operada días antes por un problema colecistitis crónica, es decir por la inflamación e irritación prolongada de la vesícula biliar. Para el fiscal, los profesionales no “efectuaron planteos de diagnósticos diferenciales, como así también la solicitud de algún método de imágenes complementarios posquirúrgicos, como una ecografía abdominal y tomografía”. 

En vez de hacer nuevos exámenes, Ambrosini y Ariza “realizaron una intervención quirúrgica” a la paciente, quien padecía una pancreatitis aguda, señaló el funcionario. En este marco, Sibuet sostuvo que las conductas de los médicos “resultan negligentes y contrarias a los reglamentos y deberes a su cargo que, en su conjunto, además de modificar las chances de sobrevida de la víctima, ocasionaron un peligro que ocasionó a muerte” de la víctima. 

En diálogo con Trama Urbana, la hija de la víctima, Vanina Sosa recordó que tanto ella como su padre realizaron todos los trámites posibles para trasladar a Medrano a una clínica de La Plata, pero el Instituto no prestaba colaboración. “Durante la noche del domingo mi mamá tenía fiebre. La operaron de una asepsia, nunca nos dijeron que la iban a volver a operar. Nos enteramos de que habían mandado a traer sangre desde un hospital para mi madre. A la mañana del domingo falleció”, agregó la joven. 

La familia de la víctima contrató al abogado Roberto Casorla Yalet, quien logró que la causa pasara de “averiguación de causales de muerte” a “homicidio culposo”.