Ocurrió en la zona de 44 y 25, cerca de la Plaza 19 de Noviembre y a un par de calles de donde ejecutaron a Santiago Stirz a fines del año pasado. “Gánense la vida trabajando”, dijo, indignada, la madre del damnificado.
17/01/2021 - 00:00hs
El barrio La Loma continúa con su creciente inseguridad. En la jornada de ayer, un repartidor salvó su vida de milagro luego de que dos delincuentes le gatillaran en el pecho, al intentar resistirse a un asalto. Los maleantes le quitaron su motocicleta y escaparon.
La violenta secuencia tuvo lugar en la zona de 44 y 25, apenas a unas pocas calles de donde ejecutaron de un tiro en la cabeza a Santiago Stirz, el músico que estaba a bordo de su bicicleta. En dicha ocasión, dos hampones le dispararon en la sien y se dieron a la fuga, dejándolo tirado en la calle.
En este nuevo episodio delictivo, los bandidos sorprendieron a la víctima cuando estaba trabajando. El joven, que hace repartos para una heladería, se encontraba entregando un pedido, por lo que dejó su moto estacionada sobre la vereda.
En ese momento aparecieron dos individuos, quienes aprovecharon la situación e intentaron apoderarse del vehículo. Sin embargo, el damnificado se dio cuenta de la maniobra e intentó evitar que se llevaran su motocicleta, ya que es su herramienta de trabajo. Fue en ese momento cuando los sujetos, sin dudarlo, sacaron un arma de entre sus prendas y efectuaron un disparo.
Para fortuna del repartidor, la bala no salió, pero, lejos de sentir algún tipo de remordimiento, el delincuente que estaba armado volvió a gatillar. No obstante, nuevamente el proyectil quedó atascado en el revólver y el damnificado salvó su vida de milagro.
Tras esto, los sujetos se subieron a la moto y se dieron a la fuga con rumbo desconocido. Indignada por lo sucedido, la madre del muchacho denunció lo sucedido y les dejó un mensaje a los ladrones: “Quiero que se la devuelvan, gánense la vida laburando y no robando a la gente que trabaja”.
Asimismo, si bien se lamentó por el asalto, se mostró agradecida porque su hijo resultó ileso. “Por defenderse le gatillaron en el pecho. Gracias a Dios no le pasó nada, pero tiene una tristeza enorme porque era su herramienta de trabajo”, concluyó.
Cabe mencionar que un hecho similar tuvo lugar en Romero, donde unos delincuentes asaltaron a un joven en 521 y 169. Allí, el damnificado fue abordado por tres maleantes, quienes le quitaron su bicicleta amenazándolo con una pistola y escaparon con rumbo desconocido.