Pidieron 50 años para violador serial

Domingo Corillano recibió múltiples denuncias, de las cuales la mitad llegó a juicio. Ya había estado preso por los mismos delitos

El fiscal Martín Chiorazzi  pidió 50 años de reclusión para Domingo Corillano, apodado el “Sátiro del can can”, acusado de haber violado a seis mujeres entre 2004 y 2009 en distintas zonas de La Plata. 

Según lo expuesto por el funcionario judicial, el primero de los hechos ocurrió el 31 de agosto de 2007 cerca de la medianoche, cuando el imputado tomó por detrás a una joven y, mientras le apuntaba con un arma de fuego, la obligó a dirigirse hasta un descampado ubicado en las inmediaciones de calle 12 y 525 de Tolosa. Allí la ultrajó de varias formas. 

Chiorazzi mencionó que el modus operandi del imputado era siempre el mismo: tomaba a las jóvenes por detrás con fuerza, las llevaba a un descampado amenazándolas con un arma de fuego o un cuchillo, les tapaba la cabeza con una bufando o un cuello polar, mientras que él se cubría el rostro con una media. Una vez inmovilizadas las violaba, golpeaba y humillaba, para después ordenarles que se dieran vuelta, caminaran hacia adelante y no miraran hacia atrás porque si no las iba a matar. Mientras la víctima se marchaba, él se daba a la fuga. 

Las consecuencias de los abusos fueron tan profundas en lo psicológico que una de las víctimas intentó suicidarse tres veces y comenzó a consumir drogas, otra de ellas se mudó a Chile, y una tercera perdió su trabajo y dejó sus estudios. Tres meses después de haber sido ultrajada, la cuarta víctima de un total de seis que llegó a debate comenzó a tener síntomas de asfixia, lo que le causó la muerte. Una de las modalidades de ataque de Corillano era ahorcar a las muchachas hasta dejarlas indefensas.  

A pesar de que utilizaba medias para ocultar su cara, varias de las jóvenes lograron verlo. Incluso, una de ellas, luego de ser abusada corrió a la casa de su novio y le contó lo sucedido, este salió hacia el descampado, vio un Ford Falcon y comunicó su patente a la Policía. Este dato permitió a la DDI realizar un allanamiento en el taller del acusado donde incautaron elementos que probaron su autoría, además de la comparación de su ADN con el que fue hallado en las víctimas.

El sujeto ya estuvo preso por el mismo delito; la primera vez fue en 1979 por trece violaciones y entonces recibió 18 años de prisión. El veredicto del Tribunal Oral en lo Criminal nº 4 se dará a conocer el 30 de junio. 

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