Se conoció la causa de muerte del niño cuyos padres denuncian mala praxis

Rodrigo tenía 12 años y lo habían llevado a dos hospitales. En ambos lo enviaron a su casa y en uno de ellos le diagnosticaron gastroenterocolitis. Continúa la conmoción

Continúa la conmoción por la muerte de Rodrigo Ortiz, el niño de 12 años con Síndrome de Down que falleció en su domicilio de 121 entre 521 y 522 durante la mañana del lunes, después de que sus padres lo llevaran a dos hospitales. Sin embargo, en ambos lo mandaron a casa y en uno de ellos le diagnosticaron gastroenterocolitis. Ahora, se conoció la causa de muerte.

Esto se supo luego de que la familia del pequeño diera a conocer detalles del certificado de defunción. Según sus dichos, en el mismo se afirma que, además del paro cardiorrespiratorio, Rodrigo tenía un bolo fecal.

Asimismo, en el examen físico del Hospital de Niños se detallaba que tenía “abdomen distendido”, o sea que habría estado en buenas condiciones, lo que contradeciría el informe médico. Debido a esto, los familiares del menor aseguran que se trató de un caso de mala praxis.

Para poder costear el velorio, los padres de Rodrigo recibieron ayuda de todo el barrio, ya que su situación económica no es de las mejores. Allí, fue despedido por vecinos, seres queridos y allegados.

Como informó diario Hoy, todo comenzó durante la tarde del domingo, cuando la víctima presentó dolores de estómago, vómitos y diarrea. Sus padres lo llevaron hasta el hospital Gutiérrez, donde llegó el primer diagnóstico fallido. Los galenos que lo revisaron dijeron que seguramente se trataba de algo que había comido. Indicaron que estaba deshidratado por una gastroenterocolitis, por lo que le dieron a los padres unas sales. La madre se las administró una vez que regresaron al hogar.

No obstante, Rodrigo no mejoraba. Por el contrario, continuaba con molestias. De hecho, su semblante se puso pálido y empezó a devolver con consistencia negra.

Como a la noche el cuadro no cambió, los padres lo trasladaron al hospital de Niños Sor María Ludovica. Ahí los profesionales tampoco detectaron nada extraño, así que solo le llevaron a cabo un control y le pidieron que se cuidara con las comidas porque se trataba de un caso de gastroenteritis.

Finalmente regresaron al inmueble de Tolosa, donde Rodrigo se acostó y fue encontrado muerto por su propia progenitora horas después. Desesperados por el desenlace, los padres ya radicaron la denuncia, tramitada en la comisaría Sexta y en la Unidad Funcional de Instrucción en turno, donde se abrió una causa caratulada como “averiguación de causales de muerte”.

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