Se resuelve el misterio de Arturo Seguí

Mientras Sergio David Quiñones sigue en estado crítico luego de que una bala destrozara su cabeza la mañana del lunes, el día de hoy será un día clave para las pericias que se están desarrollando y que determinarán si se trató de una tentativa de suicidio o de homicidio. 

Según le contó un jefe policial a este medio, “los resultados de la prueba de dermotest deberían estar en las primeras horas de mañana (por hoy), al igual que las pericias telefónicas sobre su celular, para ver con quién habló y, sobre todo, con quién lo hizo por última vez”. 

Si bien en un momento la carátula de la causa había sido “tentativa de suicidio”, esta cambió a “homicidio agravado en grado de tentativa”. Para que eso ocurriera fue determinante el testimonio del hermano del damnificado quien refirió que, antes de que Quiñones apareciera agonizando en la vía pública (en diagonal 145 entre 409 y 410), habían sido amenazados por un parquero de 20 años que les disparó tres veces sin dar en el blanco. Antes de irse, dijo: “Los voy a matar a ustedes, uno por uno”. 

En base a eso, se lo identificó en la causa, aunque no hay ningún pedido de detención. Esto podría cambiar de un momento para otro, siempre y cuando en los estudios no se encuentre rastro alguno de pólvora en la víctima, claro indicador de que no quiso quitarse la vida sino que atentaron contra ella.   

Ayer, una vecina del barrio que se identificó como Graciela, se comunicó con este diario y habló acerca de la inseguridad en la zona, afirmando que “ni siquiera los colectivos quieren pasar”. Denunció que actúa una “banda de delincuentes menores” y aseguró que Quiñones “intentó comunicarse con el 911” tras recibir el disparo.