El termómetro de la economía al rojo vivo
El dólar paralelo ayer llegó a $ 10,50, mientras que el Gobierno nacional sigue devaluando el peso. La inflación no da tregua y este año se disparan aún más los precios
El año arrancó con temperaturas que hacen estallar los termómetros. Pero también con aumentos en los combustibles, el transporte y los alimentos. Además de una suba del dólar que lo ubicó ayer a $ 10,50 en el mercado paralelo, por lo que el peso continúa perdiendo valor.
El precio histórico al que se vedió ayer el llamado dólar blue superó la marca anterior del 8 de mayo de 2013. Mientras, se amplió a 59,1% la brecha con el dólar oficial, que también subió y ya cotiza a $ 6,60. Aunque es inaccesible para el común de los argentinos.
Según explicó el economista Pedro Andrieu a Hoy, “el dólar se mueve reflejando la inflación interna, aunque si uno la calculara acumulativamente según la tasa verdadera y no la del Indec habría que ver si el dólar se está disparando o todavía está atrás de la inflación”.
Es los tres años que van desde 2011 (cuando el gobierno instaló el cepo cambiario) hasta 2013, el dólar paralelo subió 152%. Pero lo más llamativo es que la cotización oficial, fijada por el gobierno nacional aumentó 65% desde 2011 y sólo el año pasado creció 32%, es decir que la devaluación del peso que hizo el propio gobierno triplicó la ficción de inflación que difunde el Indec.
La mayoría de los cálculos serios estiman que la inflación rondó el 30% en 2013, lo que significó la mayor suba de precios en los últimos veinte años. Pero también anticipan que este año será mayor.
En enero ya hay un adelanto de las subas que se vienen. La autorización del Gobierno para aumentar el 66% el transporte público, además aumentos en los combustibles del orden del 10%, lo que se traslada a otros precios, como los alimentos, que ya en los últimos tres meses del año pasado se encarecieron un 15%. Mientras, el gobierno nacional pretende fijar precios con un acuerdo que comenzó a regir ayer. Aunque se demostró que está condenado al fracaso como los anteriores porque los apenas 194 productos que incluye ya fueron aumentados, son escasos y no se encuentran en los supermercados.
Por otro lado, Andrieu destacó que, ante la inflación, “en el valor del dólar también se refleja el intento de la gente que no puede proteger el valor del ingreso y busca al menos proteger el valor de los ahorros”. Además, el exsecretario de Comercio de la Nación destacó que “en la medida en que las reservas de un Banco Central son escasas en una situación de este tipo es lógico que se espere algún tipo de devaluación”.
Aunque la presidenta Cristina Fernández se empeñe en tratar de disfrazarlo, el año pasado su gobierno depreció el peso más que en toda la década K. En el inicio de 2013 para comprar un dólar hacía falta $ 4,92, mientras que al finalizar el año se necesitó $ 6,53 ($1,61 de diferencia). En tanto, desde enero de 2003 hasta comienzos de 2013 el dólar pasó a costar de $ 3,36 a $ 4,92 ($ 1,56).
Sin embargo, la devaluación continúa este año. El economista Federico Sturzenegger ironizó ayer con la suba de “4 centavos, el oficial y pensar que había que esperar otro gobierno para devaluar”, como había dicho la presidenta en mayo de 2013. Además, el diputado nacional del PRO expresó que “algunos van aceptando que emitir casi 100.000 millones de pesos en 2013 algo tiene que ver con la inflación, o al menos eso quiero creer”.
En ese sentido, el economista en jefe de M&S Consultores, Facundo Martínez consideró que “el problema del dólar es la montaña de emisión de pesos con los que el Banco Central financia al Tesoro”. Y graficó: “estamos inundados, hay más pesos que dólares. Lo que está pasando ahora es una consecuencia de una política”, por lo que remarcó que “no podemos decir que esto es consecuencia de la gente que se va de vacaciones. Si a alguien le sirve creer que esto es un problema estacional que lo crea, pero esto es un tema macroeconómico”, sentenció.
En 2013 el Banco Central duplicó lo que destinó al gasto público
Durante 2013, hasta el 27 de diciembre, el Banco Central giró $ 91.998 millones al sector público, un 94% más que los $47.495 millones que había desembolsado en 2012.
El último informe de la autoridad monetaria muestra que la mayor presión se percibió en los últimos seis meses, ya que de los casi $92.000 millones con los que se abasteció al Tesoro en 2013, entre julio y diciembre se derivaron $84.900 millones, es decir, casi el total.
En tanto, el incremento del monto emitido para abastecer al sector público si se lo compara con los datos de 2010 es casi cinco veces mayor, dado que ese año el monto girado fue de $19.478 millones.
La etidad también informó que la emisión de 2013 -sin contar el último día hábil- fue por $66.705 millones, aunque analistas provados aseguran que fue mayor. Para este año, el presidente del BCRA Juan Carlos Fábrega, reconoció que es necesario reducir la base monetaria.