Violenta entradera en El Mondongo

Sucedió ayer al mediodía en una vivienda ubicada en 117 entre 68 y 69. Actuaron tres delincuentes armados que escaparon a pie con objetos de valor y más de 80.000 pesos

Un grupo de malvivientes armados ingresaron ayer al mediodía a una vivienda del barrio El Mondongo y 

atacaron a una jubilada de 72 años. Según voceros, la mujer fue maniatada y brutalmente golpeada por los ladrones, quienes luego se dieron a la fuga a pie con algunos objetos de valor y más de 80.000 pesos en efectivo.

El episodio se produjo alrededor de las 12 del mediodía en un inmueble ubicado en 117 entre 68 y 69, donde ingresaron tres cacos que se movilizaban a pie por el barrio. Gustavo Bryk, hijo de la víctima, le comentó a Trama Urbana: “Estaba trabajando cuando me fijé que en el celular tenía una llamada de la casa de mi mamá. Era un vecino, avisándome que la habían asaltado y le habían pegado, pero que estaba bien. Pedí permiso en el trabajo y me vine lo más rápido posible”. 

Una vez en el lugar, Gustavo se encontró con una terrible escena: “La vi en la vereda junto con algunos vecinos y la Policía. Le habían pegado en el hombro, lo tenía todo 

hinchado, y tenía un corte en la mano porque la habían golpeado con un revólver. Por lo que me contó, venía de la verdulería que está a una cuadra de acá. Los tipos venían de la misma dirección, desde calle 69. Aparentemente se metieron en la casa antes de que ella llegara, forzando una de las ventanas”.

De acuerdo a las filmaciones de la cámara de seguridad de un domicilio ubicado enfrente, los malhechores estuvieron cerca de 15 minutos en el interior de la vi­vienda, revolviendo y saqueando todo lo que podían antes de la llegada de la víctima. “En ese momento, mi mamá estaba en la cocina lavando la verdura y escuchó un ruido en el comedor. Se asomó y no vio nada. Siguió cocinando y entonces se le aparecieron los tres ladrones que venían de la pieza y se la llevaron para el baño. La mantuvieron atada con un cinturón, le pegaron y le pidieron oro, plata, y dólares”, aseguró Gustavo.

Por último, agregó: “Se fueron a pie con un bolso blanco, por el mismo lugar por el cual vinieron. Huyeron con vajilla, un rifle de aire comprimido que era mío y, 80.000 pesos. Es más, me atrevo a decir que con un poco más de plata, porque ella justo había cobrado la jubilación el día anterior. Estos tipos la hacen fácil, vos te levantás todos los días a las 5.30 de la mañana para ir a trabajar y ellos te sacan todo en un segundo”.

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