Carbonero sigue siendo el más desequilibrante y preocupan las lesiones

Ambos equipos estuvieron sin ritmo y con muchas imperfecciones. Carbonero siempre demostró ser el jugador más desequilibrante de Gimnasia. Platense esperó y aprovechó dos errores involuntarios del Lobo.

El primer error llegó por una salida del arquero que agarró a los cuatro defensores en línea, con el volante central que rechazó y Fratta que intentó despejar, pero Tissera capturó la pelota: la jugada se ensució y el “9” (Mansilla) terminó haciendo el gol. El segundo tanto también llegó por un pelotazo frontal que agarró en línea a los centrales y Rey se apuró a salir.

Gimnasia se mostró lento. Necesita más del manejo de Brahian Alemán que otra vez jugó muy atrás. Desde ese lugar le cuesta mucho poner pases entre líneas. Platense presionó después de los 30 minutos, apostó a los pelotazos largos y confundió a la defensa.

En la parte final Gimnasia salió a buscarlo sin orden, salteando líneas. Con los cambios, el equipo tuvo más energía y vida: Colazzo y Contín le cambiaron la cara al equipo en el ataque. A los 28 minutos llegó una estupenda definición de Pérez García que lo puso nuevamente en partido a Gimnasia. Y recién en la parte final, cuando Platense se quedó, Fratta capturó un rebote después de un remate de Contín y tuvo su premio en el debut soñado en el equipo.

No fue un partido bien jugado, y creo que el resultado estuvo bien. Gimnasia va a tener que mejorar mucho, ya que encima preocupan mucho las lesiones musculares. Por ser el primer partido, tiene mucho para mejorar.