El boxeo argentino está de luto, la leyenda murió a los 87 años.
El boxeo argentino está de luto. La leyenda Horacio Roquiño Acavallo falleció a los 87 años en las últimas horas. Paradójicamente, la noticia se conoció en la jornada de ayer, 14 de septiembre, cuando se celebra el Día del Boxeador Argentino.
“Así te voy a recordar viejo! Con los brazos en alto como un campeón. Gracias por tus enseñanzas y por inculcarme tus valores. Descansa en paz”, publicó su hijo en redes sociales.
Si bien no se confirmaron las causas de su muerte, era de público conocimiento que Acavallo venía luchando desde hace más de una década contra el Mal de Alzheimer, una enfermedad progresiva que afecta a la memoria y otras importantes funciones mentales. En los últimos tiempos, su condición había empeorado y tuvo que ser internado en una clínica de recuperación.
Acavallo, nacido el 14 de octubre de 1934 en Villa Diamante, Lanús, fue parte de una familia humilde. Tuvo que trabajar juntando cartones junto a sus cuatro hermanos, pero con el paso del tiempo, cumplió el sueño de su vida.
Se convirtió en boxeador profesional y en 1966 se produjo uno de los momentos más icónicos en la historia del boxeo nacional.
El 1 de marzo de 1966, Roquiño venció en Tokio al japonés Katsuyoshi Takayama para convertirse en campeón mundial, el segundo en la historia del pugilismo argentino tras la consagración de Pascual Pérez en 1954 en la misma ciudad asiática.