Giro a la derecha

Como en un tablero de ajedrez, desde los organismos internacionales de derecha, están moviendo sus piezas para destruir el progreso realizado en Latinoamérica.

La prueba mas fuerte y reciente es la directiva de encarcelar al exPresidente brasileño Lula da Silva, el candidato popular que estuvo al frente del país a lo largo de ocho años y que sacó de la pobreza a 40 millones de personas, transformándolas en trabajadores de clase media. 

Por su parte los distintos actores políticos que encabezan a los partidos más conservadores, con Donald Trump a la cabeza, quieren destruir lo que queda de los rezagos de un crecimiento que se vio auspiciado principalmente en Brasil bajo la directiva de Lula y que acompañó el mandato de Dilma Rousseff. 

Entre los argumentos que se emplearon para bajar de la candidatura al ex Presidente, se esgrimen como condiciones casi irrisorias que Lula obtuvo un departamento de tres dormitorios a manos de una empresa como coima. 

Escuchar que se usen estos discursos desde la derecha internacional, o como en nuestro país lo hace Mauricio Macri llama a la tristeza, porque de seguir los pasos que mandan los organismos internacionales para llevar una política socioeconómica aprobada a rajatabla, sería aceptar que las clases trabajadoras pierdan derechos frente a las grandes corporaciones.