Israel lanzó una tercera oleada de ataques contra el Líbano
Luego de bombardear en un día 290 instalaciones de Hezbollah, anoche se preparaba contrarrestar un nuevo ataque por parte del grupo terrorista libanés.
La Fuerza Aérea israelí lanzó en la jornada de ayer una tercera oleada de ataques contra el sur del Líbano.
“Hemos estado atacando extensamente en el sur del Líbano, tras la detección de Hezbollah preparándose para disparar hacia territorio israelí. Decenas de aviones de la Fuerza Aérea israelí están atacando actualmente objetivos terroristas y lanzaderas de cohetes para eliminar la amenaza que pesa sobre la población civil israelí”, indicó en un informe el portavoz de las FDI, el contralmirante Daniel Hagari.
“Estamos atacando y degradando metódicamente las capacidades de lanzamiento de Hezbollah, eliminando a comandantes y terroristas, como hicimos a lo largo del día. En total, hoy hemos destruido unos 400 emplazamientos de lanzamiento de cohetes de Hezbollah, incluidos miles de lanzacohetes”, añadió el oficial.
Los aviones israelíes “atacaron miles de barriles lanzadores que estaban listos para su uso inmediato para disparar hacia territorio israelí”, así como “aproximadamente 180” otros objetivos no especificados, según un comunicado militar.
Asimismo, el grupo terrorista libanés confirmó también el fallecimiento de 16 de sus miembros en el bombardeo, incluidos dos altos cargos como el comandante Ibrahim Aqil y Ahmed Wahbi, dirigente del cuerpo de élite las Fuerzas Radwan.
Tras los bombardeos contra posiciones de Hezbollah, Israel se preparaba anoche ante posibles ataques por parte del grupo terrorista.
Hagari anunció nuevas restricciones para los civiles en el norte de Israel, desde Haifa para el norte, a medida que se intensifican los combates en la región. “Les solicitamos que sigan las directrices del comando del Frente Interior”, señaló.
“Es posible que en el plazo inmediato se lancen cohetes y otras amenazas contra Israel”, añadió.
Por su parte, Estados Unidos instó a sus ciudadanos en el Líbano a salir del país. El departamento de Estado de Estados Unidos elevó el nivel de alerta a categoría cuatro, de “no viajar”, e instó a todos sus ciudadanos en el país a abandonar el territorio mientras haya vuelos comerciales disponibles.