Aseguran que la Primaria 14 de Villa Elisa corre peligro de derrumbe
Está situada en calle 14 y 423. Los padres de los alumnos advirtieron que dejó de funcionar el comedor y que resulta “un peligro” caminar dentro de la escuela.
Padres y alumnos de la comunidad educativa de la Escuela Primaria número 14 de Villa Elisa dejaron constancia del estado en el cual se encuentra el establecimiento educativo de la zona norte de nuestra ciudad, con techos que empezaron a caerse y paredes que anticipan un posible derrumbe.
La escuela 14 está situada en calle 14 y 423 de Villa Elisa. En ese lugar se ha suspendido el servicio del comedor, que solía alimentar a más de 400 chicos.
“Dado que es una escuela doble jornada tratamos de buscar alguna solución. Vinieron desde el Consejo Escolar a arreglar la cocina, pero empezaron haciendo tareas y luego no se terminaron”, expresó preocupada una de las madres de esta escuela.
Según pudo averiguar este diario, en el mes de octubre del año pasado se iniciaron nuevos trabajos de mantenimiento en la escuela, pero luego se detuvieron durante el receso de verano.
“El argumento que dieron para no continuar con las obras antes de que arranquen las clases en marzo fue que es muy caro el presupuesto”, detalló uno de los padres de esta comunidad educativa. Asimismo, en el lugar se denunció un fuerte olor a gas, que podría suponer una pérdida.
Pese a la llegada del otoño, los alumnos deberán concurrir a clases sin la posibilidad de contar con la calefacción, ya que ante las sospechas de una fuga se decidió cerrar la llave de paso del gas. “Los chicos necesitan tener clases presenciales por todo lo que pasó en los últimos dos años, pero al mismo tiempo sabemos que es difícil que se pueda seguir así mucho tiempo más. Reclamamos una solución y pedimos la ayuda de toda la sociedad”, expresó preocupada la mamá de una alumna que decidió visibilizar el estado de la escuela.
Sigue el conflicto en el San Miguel
Después de lo que significó una semana con reclamos y sentadas por parte de un grupo de alumnos que denunció acosos y amenazas dentro del establecimiento educativo San Miguel, autoridades de esta escuela que está en 135 y 44 no logran destrabar la situación ni garantizar la seguridad de los alumnos.
Un adolescente acusado por otros de manipular una trincheta presuntamente a modo intimidante y merodear el baño de damas con fines supuestamente delictivos, tuvo que dejar de concurrir, tras un acuerdo entre los directivos y los padres del alumno.
La familia del estudiante apuntado se asesoró con el abogado Marcelo Peña y se constó que hasta el momento no hay denuncias formales en sede judicial en contra del joven señalado. Por el contrario, se dejó constancia de amenazas recibidas por el alumno y no descartan impulsar una acción judicial para frenar las agresiones a las que hacen mención, hasta tanto el colegio no resuelva la situación de convivencia interna.