El Congreso estadounidense aprobó el billonario plan de estímulo económico de Biden
El mismo promete una reactivación que ponga freno a la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.
El Congreso estadounidense aprobó hoy el plan de estímulo económico por 1,9 billón de dólares, la columna vertebral del plan del presidente Joe Biden para reactivar la economía y frenar la crisis provocada por la pandemia del coronavirus.
El ambicioso paquete de medidas, que ya contaba con el aval del Senado, fue aprobado hoy en la Cámara de Representantes por 220 votos contra 211, lo que marca una total polarización entre la bancada oficialista demócrata y la oposición republicana, que votó en bloque por el no.
El opositor Partido Republicano se ha opuesto de manera unánime a la ley de estímulo económico por considerarla excesiva y llena de medidas "de extrema izquierda" que van mucho más allá que la lucha contra la debacle causada por la pandemia.
La cantidad da vértigo: 1,9 billón de dólares, el equivalente al PIB de Italia en 2020. Un monto suficiente como para tener un impacto considerable en el crecimiento, según los economistas, y sobre la vida de millones de estadounidenses.
"Es una ley notable, histórica, que conducirá a una transformación profunda y permitirá avanzar mucho en la lucha contra el virus y responder a nuestra crisis económica", aseguró ayer la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi.
Biden insiste en que Estados Unidos necesita "desesperadamente" estas medidas para salir de la crisis provocada por la pandemia, y ha prometido promulgar el "plan de rescate" apenas sea adoptado por el Congreso.
El mandatario recuerda repetidamente su larga etapa como senador capaz de conseguir compromisos con el otro campo, pero no ha logrado convencer a ningún legislador republicano de respaldar la iniciativa.
El plan ya había superado otra etapa decisiva anoche con el voto de procedimiento en la Cámara: 219 demócratas aprobaron las normas que regularán la votación final, mientras que 209 republicanos y un demócrata las rechazaron, informó la agencia de noticias AFP.
Biden visitó ayer la que es considerada como la ferretería más vieja de Washington, que se benefició de uno de los programas de ayuda del Gobierno del anterior presidente, el republicano Donald Trump, cuyas medidas serán prolongadas ahora.
Los demócratas insisten en el hecho de que, con su versión, las pequeñas empresas familiares, y especialmente las gestionadas por personas integrantes de minorías, recibirán un mayor apoyo.
"Dimos un paso de gigante" para ayudar a los estadounidenses, dijo Biden el sábado pasado tras la votación en el Senado de este plan, una de sus grandes promesas de campaña.
Las modificaciones aportadas al Senado bajo la presión de los moderados hacían temer una rebelión progresista. Pero el apoyo firme del senador independiente Bernie Sanders al texto negociado calmó la tensión entre los jefes del partido.
El exvicepesidente Biden recuerda sin cesar el ejemplo de la gran crisis de 2008, cuando fue mano derecha del entonces presidente Barack Obama para poner en marcha un plan de rescate económico en 2009 por unos 800.000 millones de dólares.
La primera economía mundial tuvo una contracción de 3,5% el año pasado, la mayor desde la Segunda Guerra Mundial, y Biden insiste en que es mejor pensar en grande para tratar de evitar una recaída.
Según expertos, este paquete millonario debería impulsar el crecimiento.
Según la Casa Blanca, esta ley "histórica" creará más de 7 millones de nuevos puestos de trabajo este año, abaratará costos de salud y salvará vidas al impulsar la vacunación contra el coronavirus.
La Presidencia afirma igualmente que la pobreza en los niños se reducirá a la mitad.
Con la aprobación del proyecto de Biden se mantendrán muchos de los programas anteriores de otros paquetes de ayuda aprobados en 2020, por 2,2 billones de dólares y 900.000 millones respectivamente.
Además, repartirá cheques de hasta 1.400 dólares a muchos estadounidenses y concederá ayudas a los Gobiernos estatales y locales con problemas de liquidez.
También prolongará subsidios por desempleo excepcionales que caducan el 14 de marzo, hasta septiembre.