Rusia advierte a los ciudadanos que viven cerca de objetivos militares: "que se vayan de sus casas"

Sin dudas que los ciudadanos de Ucrania viven los momentos más difíciles de su historia, algunos refugiados, los cuales llegan casi a los 700.000 y otros que todavía no han podido irse, sumado a los hombres mayores de 18 años que tuvieron que quedarse a pelear en el frente de batalla.

No solo basta con semejante sufrimiento sino que el infierno parece no terminar, ya que las fuerzas militares rusas cada vez están más adentro de Kiev y los esfuerzos de los soldados y reservistas ucranianos se van agotando.

En estos momentos, los bombardeos ponen su eje en Járkov, donde ya destruyeron casi por completo al ayuntamiento y ante las quejas de los organismos internacionales sobre ataques a civiles (informan que murieron más de 11 este martes), el gobierno ruso manifestó que estos deben alejarse de los objetivos militares.

Durante las primeras horas de la tarde (horario ucraniano), Zelenski habló en conferencia ante el Parlamento Europeo y dijo: "Sin ustedes, Ucrania está sola. Hemos demostrado nuestra fuerza, hemos demostrado que somos iguales que ustedes. Demuestren que están con nosotros, que no nos dejarán de lado".

Si bien los boicots a empresas, organismos, atletas y distintas marcas rusas, continúan, por parte de federaciones y organizaciones internacionales, nada parece detener el avance de las tropas de Putin, y Ucrania está cada vez más debilitada, teniendo en cuenta el poderío militar ruso.

Las últimas informaciones por estas horas indican que Ucrania anunció la emisión de bonos del Tesoro, para financiar a su ejército y los gastos estatales durante el conflicto con Rusia, invitando a ucranianos y extranjeros a que participen en su subasta pública.

Minutos antes, la ONU lanzó un pedido de ayuda de emergencia para reunir 1.700 millones de dólares en fondos para dar ayuda a las víctimas de la invasión. Estiman que aproximadamente 12 millones de personas dentro de Ucrania van a necesitar ayuda y protección, por lo cual proyecta que unos 4.000.000 de desplazados podrían requerir ayuda en países vecinos.