Las repercusiones del “vacunagate” no se hicieron esperar

Las derivaciones del denominado “vacunagate” no se hicieron esperar. Más de un funcionario y algunas personalidades de la esfera política tuvieron que salir a aclarar su situación para “despegarse” de cualquier manto de sospecha sobre su vacunación.

Uno de ellos fue el líder de Camioneros, Hugo Moyano, quien se vacunó en el Sanatorio Antártida junto a su esposa y su hijo: “Estoy vacunado porque soy el presidente de dos obras sociales y por la edad que tengo. No formé parte para nada de ninguna nómina de vacunados VIP”.

Por otro lado, los presidentes de las comisiones de Relaciones Exteriores del Senado y Diputados, Jorge Taiana, y Eduardo Valdés, respectivamente, aseguraron que no ejercieron ningún privilegio para acceder a la vacuna contra el coronavirus, sino que se la aplicaron luego de haber sido invitados por el Presidente Alberto Fernández a integrar su comitiva para viajar a México:

“Nuestro caso aplica a la categoría prioritaria de personal estratégico: toda persona que desarrolle funciones de gestión y/o conducción y funciones estratégicas necesarias para el adecuado funcionamiento del Estado, tal cual lo establece el plan estratégico para la vacunación contra la Covid-19 en Argentina”.

Otra voz que resonó a través de los medios fue la de Estela de Carlotto, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, quien no solamente aclaró su situación respecto a la vacunación sino que además acompañó la decisión del Presidente de despedir a González García: “Yo creo que la medida que tomó el Presidente es correcta, porque corresponde que lo saque del lugar, dado que fue una cosa inconsulta y hecha de una manera muy extraña”.

Y por supuesto en todo este entuerto no podía faltar la oposición, que a través de un duro comunicado denominado “Otra vez la inmoralidad oficialista” apuntaron: “El caso del vacunatorio VIP es de una absoluta inmoralidad, hipocresía y apropiación de lo público”. Además, criticaron que desde el oficialismo “pretendan minimizarlo con la sola renuncia de Ginés González García”.
Exigieron al Gobierno, además, que “informen el inventario de las vacunas, los vacunatorios habilitados y el registro de todos las personas vacunadas”.