Otro indicador de la crisis: cayó el consumo de combustible

La recesión y estancamiento que vive la economía argentina no se detiene, y en uno de los sectores en los que más se observa esta situación es en el energético, donde el consumo de nafta se desploma mes a mes.

Según un relevamiento realizado por la Cámara de Expendedores Cecha, que se basa en las ventas en las estaciones de servicios, se puede observar una fuerte disminución en las ventas de combustibles del 1,5% en el primer trimestre de este año, en comparación con idéntico período de 2016. 

Uno de los datos más llamativos del estudio muestra que la mayor incidencia negativa provino de la caída del gasoil, que bajó un 12,21%, y en menor escala de la nafta súper, con una merma del 0,93%. 

Teniendo en cuenta los litros vendidos, la caída de la facturación en todo el trimestre trepó a los 639,7 millones de pesos. La baja más grande se dio en el gasoil, con $2.431 millones, seguida por la nafta común, que tuvo un retroceso de $255,4 millones.  

El estudio realizado por la cámara de expendedores deja entrever también cómo esta situación de menos venta de combustibles se relaciona a la baja en la producción nacional, ya que fue el sector industrial el que menos demandó en el primer trimestre, lapso en el que cerraron veinte pymes por día.

Además, desde la entidad recalcaron que al llevar la venta de combustibles un nivel de facturación elevado, “eso conlleva un alto porcentaje tributario, aproximadamente del 50%, y resulta visible cómo la recaudación impositiva en el período analizado impacta en el déficit fiscal”.

Cabe destacar además que las estaciones que proveen GNC se ven afectadas por el aumento de tarifas, ya que los impuestos que deben abonar subieron mucho durante 2016 y lo que va del presente año.