Prácticas clientelares de Massa

Cuando se dice que Sergio de Massa es más de lo mismo, hay razones de sobra. No sólo porque fue titular de la Anses y jefe de gabinete del gobierno kirchnerista, sino también porque recurre a las mismas prácticas clientelares que son características de los K.

Una clara muestra de ello es que, para intentar hacer número en el estadio de Vélez (allí lanzó ayer su precandidatura a presidente), sus seguidores recurrieron a repudiables prácticas. Por ejemplo, el sindicalista Rubén Ledesma, que es candidato a intendente de La Matanza por el Frente Renovador, hizo circular una nota en el gremio que preside –el Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio de la Zona Oeste- donde obliga a sus empleados a ir al acto de Massa.

Eso no es todo: la nota también dice que se tomará lista para determinar si alguien decidió pegar el faltazo, con lo cual aquel o aquella que no estuvo presente podría ser sancionado/a. Y por si algo faltaba: aquellos que acataron la orden sin chistar, serán beneficiados con un franco compensatorio.