Represión en el Congreso: aceptan a Villarruel como querellante
La admitió la jueza Servini.
La jueza María Servini admitió como querellante a la vicepresidenta Victoria Villarruel en la causa por las y los detenidos en las inmediaciones del Congreso Nacional durante el tratamiento de la Ley Bases en el Senado.
“Ella está como querellante en ese expediente”, señaló en las últimas horas en declaraciones a la prensa, y consideró que la causa “no está en abstracto”, pese a que ella misma dictaminó la “falta de mérito” para las personas detenidas.
Servini sostuvo que “la investigación es muy reciente” y dio a entender que no comparte los delitos que buscan imputar tanto Villarruel como el fiscal Carlos Stornelli. “Hay que preguntarle al fiscal Stornelli lo que vio (...). Las actuaciones vinieron muy en blanco, no teníamos elementos (para dejar a las personas en prisión)”, indicó.
En el escrito firmado por Villarruel y las abogadas Grisela García Ortiz y Mariela Andrea Cimolai, se hizo un racconto de lo sucedido e, incluso, sostuvo que la sesión se llevó a cabo con “total normalidad”, sin tener en cuenta el pedido de moción realizado por las y los senadores de la oposición para un cuarto intermedio para así poder verificar presencialmente qué era lo que estaba sucediendo en las afueras de la Cámara alta.
Villarruel sostuvo que los manifestantes habrían dañado el edificio del Congreso, pero también aseguró que el motivo de los disturbios era impedir la continuidad de la sesión que se realizaba en el Senado, lugar que estuvo vallado desde el día anterior y –según trascendió– contó con un cordón que superó los 1.500 efectivos, entre carros hidrantes y los motorizados de Policía Federal y Prefectura.
La vicepresidenta, además, denunció que detrás de la protesta estaba la intención de “aterrorizar” a la población y provocar un “golpe de Estado”.