Un empresario y su esposa fueron liberados a los tiros tras un secuestro

Un ejecutivo y su esposa fueron secuestrados por una banda que pidió $100.000 de rescate, pero los liberó cuando efectivos de laPolicía Federal se tirotearon con los ladrones, informaron voceros de la fuerza.

El hecho tuvo como víctima a un gerente de una concesionaria de la firma Chevrolet, identificado como Jorge Guaglianone (64), y su pareja, Susana Lopardo (63).

El matrimonio regresaba de festejar el cumpleaños de la mujer y circulaba en su automóvil, cuando a una cuadra y media de su casa fueron interceptados por la banda delictiva. Guglianone dijo que “en total eran cinco delincuentes, todos jóvenes” pero del coche “se bajaron cuatro” para traspasarlos al vehículo de la banda.

El hombre contó que la primera intención de los asaltantes era ir a robar a su domicilio. “Bajaron, abrieron la puerta y justo venía el vecino de enfrente. Se asustaron y nos llevaron para el lado de la autopista (del Oeste)”, relató la víctima, quien admitió que también fueron golpeados y que él terminó con puntos de sutura en la cabeza.

Estableció que los autores del hecho transformaron lo que era un ilícito en un doble secuestro extorsivo. “Llamé a mi hija pidiéndole plata y hablé con mi yerno. Exigían $100.000 pesos, pero mis hijos juntaron $40.000. Querían que llevaran la plata a Fuerte Apache”, explicó. Detalló, también, que a él lo “metieron en el baúl”, mientras que su esposa iba en el asiento trasero del auto de la banda.

Fuentes oficiales explicaron que cuando todo parecía encaminado para el pago del rescate, una de las brigadas de la Policía Federal Argentina (PFA) advirtió movimientos sospechosos en el rodado donde iban los malvivientes y los damnificados.

Sin saber que había un secuestro en curso y que en ese coche había un matrimonio en cautiverio, los agentes dieron la voz de alto y recibieron como respuesta una serie de disparos.

A raíz de la presencia policial, la banda decidió abortar el secuestro, abandonó el auto con las víctimas y logró refugiarse dentro de Fuerte Apache. Por el caso, aún no hay detenidos.