El Pincha y el Lobo otra vez frente a frente

Gimnasia pone en juego el honor y Estudiantes una de las últimas chances de no perder terreno definitivo en el campeonato. Tras decenas de comentarios y polémicas, el último choque del 2014 no reconoce al empate como un resultado que le sienta cómodo a ninguno de los dos

Muy lejos de estar colgando en el almanaque, el último clásico del 2014 pone muchas cosas en juego durante 90 minutos. El condicionante resultado del martes obliga al Lobo a revertir la imagen y tener una especie de premio consuelo en la búsqueda de la victoria. 

Los incidentes ocurridos en la zona de los palcos y la denuncia penal a Lucas Licht por incitación a la violencia imponen un cambio en la forma de encarar este nuevo derby y presiona al gobierno del club a mantener la postura dentro del estadio y apelar a un resultado positivo que pueda atenuar las críticas. 

Hasta aquí, Pedro Troglio parece ser el menos afectado por las dos derrotas oficiales contra Estudiantes en lo que va del 2014. 

Los jugadores, pero principalmente los integrantes de la comisión directiva, parecen convertirse en el foco de los cuestionamientos. 

De todas maneras, una nueva derrota podría profundizar las heridas internas, en un equipo que marcha anteúltimo en la tabla de posiciones, además de ya haber sido eliminado de dos de las tres competencias que tenía en el semestre. 

En Estudiantes, sin embargo, la clasificación del martes permitiría bajar el nivel de presión, de no ser que el equipo viene de sumar cuatro derrotas consecutivas como visitante en el campeonato y el club experimenta el último tramo de la campaña electoral. 

El buen momento de River obliga al Pincha a no dejar puntos en el camino, si pretende defender el rótulo de equipo protagonista que le valió a la dirigencia una inversión de 3 millones de dólares en el mercado de pases. 

Así las cosas, por un motivo o por otro, los dos están obligados a buscar la victoria, y el empate no se reconoce con un resultado válido en la previa.

Es la hora de bancar… a Pedro Troglio 

Gimnasia tiene como obligación ganar el clásico de hoy ante Estudiantes. Porque es un clásico, porque el historial marca que desde 2010 no consigue una victoria oficial y porque debe apagar un incendio que se está comiendo el semestre albiazul.

Pedro Troglio habló de un salto de calidad en el inicio de la pretemporada, que los dirigentes nunca le dieron al actual plantel. Sin embargo, el DT, por el arraigo indisimulable con el club y porque le gusta las difíciles, se quedó a pelear un semestre cargado con la base del torneo pasado y bastante menos en cuanto a las individualidades. Este clásico marcará el termómetro de Gimnasia para los últimos meses del 2014. Sin embargo, también será para los jugadores del riñón de Troglio, una manera de demostrarle al entrenador que no quieren perderlo y que lo “bancan”.  

En las últimas horas, las especulaciones en torno al futuro del DT albiazul tomaron un tinte bastante negativo y una nueva derrota en el derby de la ciudad, podría determinar la salida de Troglio cuanto menos en diciembre.  Es por esto, que los Barsottini, Licht, Monetti, Pouso, Fernández, entre otros, tendrán la posibilidad de bancar al entrenador y darle fuerzas para que su salida  no se cristalice. No será un clásico más. Ni para la gente, ni para Troglio, pero sobre todo para este grupo de jugadores, que consiguieron cosas importantes (ascenso y clasificación internacional) pero que tienen una deuda con ellos mismos, y sobre todo con su mentor… y es ganar un clásico oficial.