El Congreso retomó su actividad con una apretada agenda

Tras la pausa de la semana pasada, cuando diputados y senadores viajaron en calidad de veedores a las elecciones de Estados Unidos, el Congreso retomó su actividad con una agenda variopinta que incluye proyectos como la reforma electoral, que será tratada en el Senado y que ya cuenta con el apoyo de nueve gobernadores, con los que “negoció” en la Casa Rosada el ministro del Interior, Rogelio Frigerio.

Como esa iniciativa, otras que se enmarcan dentro de la reforma política son las que regulan el traspaso de mando presidencial para que no se repitan desplantes como el que le hizo en diciembre pasado Cristina Kirchner a Mauricio Macri. También está aquella  que establece la obligatoriedad de los debates presidenciales, que ya cuenta con media sanción del Senado.

La discusión se dio en un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia de la Cámara de Diputados, con la presencia del secretario de Asuntos Políticos de la Nación, Adrián Pérez, quien informó a los legisladores sobre las iniciativas. Ambas comisiones volverán a reunirse mañana a las 10 con la intención de emitir dictamen de los dos proyectos.

Sobre el traspaso de mando, los diputados de la oposición coincidieron en rechazar el artículo que otorga al jefe de Gabinete el control del proceso de transición entre un gobierno entrante y el saliente.

“La iniciativa de ubicar al jefe de Gabinete como eje de la transición representa una unificación que no es saludable. Veríamos más práctica la idea de los comités o comisiones de trabajo del gobierno entrante y el saliente”, protestó Graciela Camaño, jefa del bloque por el Frente Renovador.

En tanto, la diputada Elisa Carrió pidió que la obligatoriedad de los debates presidenciales también se extienda a los legisladores nacionales y reclamó que se regularice el financiamiento de los partidos políticos.

Sobre el financiamiento de la política, Pérez ratificó la decisión del Ejecutivo de enviar un proyecto en ese sentido.