Se roban 30.000 pesos y hasta un arma durante una entradera

Al menos tres delincuentes atacaron salvajemente a un ingeniero y a su padre en su casa de 58 entre 20 y 21. Escaparon también con relojes y las llaves de la casa

Actuaron durante la madrugada de ayer, atacaron a un ingeniero y a su padre, los golpearon y terminaron huyendo con un importante botín constituido por dinero en efectivo, objetos de valor y hasta un arma de fuego. Se trata de una nueva entradera llevada a cabo en inmediaciones del Parque Vucetich, informaron fuentes policiales.

Los pesquisas creen que el hecho se produjo alrededor de las 4 y los delincuentes ingresaron armados al chalet de 58 entre 20 y 21 por la parte trasera, para después forzar una puerta y ganar el interior, en donde los moradores se encontraban durmiendo. De inmediato fueron despertados, tratándose de un hombre de 52 años y su progenitor. Al primero de ellos “lo golpearon salvajemente” con el fin de que entregara sus pertenencias. Con esta intimidación, el hombre les dio 30.000 pesos, cinco relojes, una computadora, dos celulares y un arma calibre .40; pero, no conformes, los ladrones se apoderaron también de las llaves de la propiedad y las del auto de las víctimas.

Una vez que los delincuentes se dieron a la fuga (se desconoce hasta el momento si actuaron en complicidad de un cuarto individuo, que pudo haber actuado como campana), los damnificados pudieron recuperarse y llamar al 911. Hasta el lugar arribó un móvil del Comando de Patrullas, junto a sus pares de la comisaría Cuarta, quienes convocaron de urgencia una ambulancia para que asistiera al ingeniero, que presentaba “severos golpes en diferentes partes de su cuerpo”. Sin embargo, y pese a esas lesiones, su estado no reviste gravedad.

“Menos patrullaje”

Trama Urbana se acercó al lugar y pudo dialogar con los vecinos, ante la negativa de los involucrados. Los frentistas admitieron no haber escuchado ni visto nada y la mayoría de ellos dijo que la zona es “relativamente tranquila” y que a lo sumo “escuchan peleas de los jóvenes que vuelven de los bares” pero no fueron víctimas de “hechos delictivos en los últimos meses”. 

Sin embargo, una señora que vive en la esquina relató que malvivientes entraron por los techos hace un tiempo y le desvalijaron la finca cuando se había ido junto a su marido a una fiesta. Por último, un frentista denunció: “En el último tiempo no vi pasar a los patrulleros vigilando las cuadras, como sí ocurría antes. La seguridad depende en gran parte de nosotros mismos, de cuán alerta estemos, porque a la mínima distracción, te pueden asaltar”.