El examen de marzo fue demasiado duro para estos “estudiantes”

Muchas veces criticado y otras veces ignorado...

Cuando se espera una simple respuesta que no llega, el destino final de un camino suele alterarse. Esto fue lo que le pasó ayer a Estudiantes, que en los primeros dos minutos del partido con Godoy Cruz sufrió una ejecución venenosa de Guillermo Fernández , quien en el primer tiro tiro libre de la tarde la mandó a guardar. Andújar creyó poder embolsar el balón, pero se sorprendió tanto como un equipo que sintió que había saltado al campo de juego con un gol abajo. 

Como aquel que atraviesa una racha negativa y no le sale nada bien por un tiempo, el Pincha nunca pudo dominar con autoridad el juego. Tanto en el primer tiempo como en el segundo, al equipo de Bernardi le costó llegar con claridad al arco adversario. Muy por el contrario, Godoy Cruz soportó la reacción del rival luego del gol tempranero, y en el transcurso del primer tiempo fue un claro dominador de las acciones. 

Estudiantes cambió la imagen en el segundo tramo del complemento, cuando otra vez Pavone le aportó frescura en la definición de las jugadas: Primero rozando una pelota que llegó tras un desborde de Otero, y luego aguantando y definiendo de media vuelta para hacer lucir a Borián. 

Así como se vio la mejor versión del equipo local con las intervenciones del Tanque, en los últimos minutos las imprecisiones se apoderaron de los jugadores albirrojos que no encontraron soluciones en los pies de Dubarbier o de Campi cuando se intentó iniciar las jugadas. 

Los cambios de Bernardi tampoco ayudaron, ya que primer cambió puesto por puesto, y luego sacó a los dos volantes centrales para darles lugar a Lattanzio y Dubarbier, pero dejó en cancha a Giménez que terminó acalambrado. 

Sin dudas, a barajar y dar de nuevo.