Un gol que desató la euforia y dañó la “amistad”

Mientras Guido Carrillo celebraba el gol del triunfo, hinchas de Estudiantes que estaban en la tribuna de Peñarol fueron agredidos por algunos simpatizantes del Manya que no soportaron la derrota

Después de mucho tiempo, se vivió una noche como las de la Copa Libertadores del 2009 en el estadio Ciudad de La Plata, pero en esta ocasión fue un por encuentro por la Sudamericana, colmado con más de 20 mil hinchas albirrojos y otros 8 mil uruguayos. 

La buena relación de las hinchadas hizo que sea una fiesta hasta el final del partido, cuando la agónica definición de Guido carrillo provocó la euforia entre los seguidores locales, y la reacción de los visitantes, que no dudaron en desquitarse con los hinchas de Estudiantes que habían decidido ver el partido desde la cabera norte donde predominaban los visitantes. 

El penal que le concedió el chileno Enrique Osses, con la consecuente definición de Guido Carrillo, podría tranformarse en el final de una amistad entre las dos hinchadas y que había tenído un correlato en el almuerzo previio que se realizó en UPCN. 

A pesar del horario y los costos de las entradas (la más barata $100), el público se hizo presente en el estadio Ciudad de La Plata para alentar y acompañar en nueva oportunidad al equipo de Pellegrino, que llegaba de ser goleado ante Racing por 0-4 pero por suerte, los futbolistas le dieron una alegría con el triunfo. 

Por su parte, durante toda la jornada los hinchas uruguayos se hicieron presentes en nuestra ciudad, donde se los pudo observar en el centro platense y en las inmediaciones del estadio.

La revancha de la semana que viene, que se jugará en el mítico estadio Centenario, servirá como parámetro para definir hasta donde se dañó la amistad entre estas dos parcialidades, que ayer le dieron forma a una verdadera fiesta hasta el fatídico minuto final.