ENTREVISTA EXCLUSIVA
Jimena Frontera: “El mundo de las redes es peligroso”
En diálogo con diario Hoy, la intérprete reflexionó sobre los mensajes que circulan en el universo digital y presentó su producción teatral
Desde su niñez supo que el arte estaría inmerso en todas las aristas de su vida. Al crecer, Jimena Frontera estudió Arte Dramático, se formó entre Argentina y Estados Unidos para dar certeros pasos como actriz en obras de teatro. Asimismo fue contratada para conducir ciertos segmentos en la señal 47 Street Channel.
A través de videos en Instagram empezó a trabajar temáticas como el amor al propio cuerpo, el respeto a las libertades individuales, la eliminación de estereotipos y el bullying. En este sentido abrió un debate mediante un controversial video: aparece caminando hacia la cámara con un conjunto negro de lencería, da un giro y muestra una frase escrita en su espalda “mi cuerpo es mi templo”. Esa representación generó mucha polémica. Durante una charla con diario Hoy, la comunicadora se refirió a su carrera y a la concientización sobre los estándares hegemónicos de belleza.
—Estudiaste Arte Dramático, trabajaste como conductora y además te formaste como doble de riesgo, ¿qué te falta?
—La experiencia fue alucinante e hice una prueba en la universidad. El aprendizaje de la actriz no termina nunca, si bien tengo un diploma, eso no significa mucho porque hay que formarse siempre. Me falta un camino para recorrer dentro de lo que ya hago.
—Hiciste un video en Instagram hablando sobre los cuerpos, ¿qué opinás sobre los influencers?
—El mundo de las redes es peligroso. La gente está expuesta a un montón de ventanitas que muestran estereotipos que no son reales o fragmentos. Me costó mucho amigarme con la palabra influencer porque viene con una carga arraigada, significa que influencia o comunica. Hoy en día se muestra o crea una ilusión que no existe. Está en uno como usar esa influencia sobre los demás. Lo más importante es dar un mensaje que valga la pena. Junto a mi novio escribimos El hambre, una obra que habla sobre los trastornos de la alimentación y otros de la belleza. Teníamos pensada estrenarla en agosto, pero con la pandemia se frenó.
—Trabajaste en Estados Unidos y Argentina, ¿cuáles son tus fortalezas encontradas?
—En el exterior corren con la ventaja del presupuesto, que acá no está ni en las mejores producciones. En Estados Unidos sentí una gran competencia en los elencos, todos están formados para todo, cantan, bailan y escriben. Por otra parte, Argentina es el país que tiene más obras en cartelera, esto refleja la cantidad de artistas que tenemos.