Matthew Shepard, un mártir que cambió el mundo

Hace poco más de dos décadas, el joven universitario Matthew Shepard cumplía sus veintiún años, estaba cursando sus estudios en una facultad y se divertía junto a sus amigos nuevos en esta etapa de su juventud.

Los meses pasaban y el ciclo universitario iba sobre ruedas, pero todo cambiaría una noche en la que el joven decidió ir a divertirse a un bar sin saber que una tragedia lo encontraría esa misma madrugada.

Sucedió que a la salida del recinto, junto a otros dos individuos, el joven fue secuestrado y golpeado hasta quedar gravemente herido. Horas más tarde, fue encontrado por un ciclista que logró llamar a las autoridades.

Fue llevado al hospital, pero lamentablemente ya era tarde, ya que falleció unas horas después.

Los hechos de público conocimiento

Este brutal ataque por razones de odio, más precisamente porque el chico era gay, sirvió para cambiar la legislación en Estados Unidos.

Corría el año 1998, más precisamente el 6 de octubre, cuando Shepard y unos amigos estaban organizando una serie de jornadas para la semana de la concientización sobre la comunidad LGTBQ+.

Luego los chicos dejaron sus asuntos y tareas resueltas para ir a un bar y así despejarse mientras tomaban un café. Asimismo, entrada la nochecita fueron por unas cervezas para divertirse. Allí, Matt ya estaba solo y fue abordado por dos jóvenes de su edad llamados Aaron McKinney y Russell Henderson, que fingían ser homosexuales para poder ganarse su confianza. Al cabo de unas horas, lo convencieron de que lo llevarían a su casa sano y salvo, pero esto distaba de suceder porque los sujetos lo llevaron a un descampado, lo golpearon más de veinte veces con los puños y con un arma, y lo ataron a un alambrado ubicado en un bosque, donde lo dejaron maniatado, desnudo y sin poder reaccionar debido a la gavedad de sus heridas.

Casi veinte horas más tarde, un joven que pasaba por el lugar lo encontró, y al principio creyó que se trataba de un espantapájaros. Luego vio que era un hombre, llamó a las autoridades y lo llevaron de urgencia a un hospital.

Sin embargo, no se pudo hacer mucho debido a las graves lesiones que había sufrido en su cabeza. Como resultado, después de luchar por su vida durante cinco días, finalmente falleció.

Por su parte, los padres de Matt estaban en Arabia, donde trabajaban, y debieron viajar de urgencia para despedirlo. Su mamá, Judy, compartió en un medio de alcance nacional que su hijo se había declarado abiertamente gay, y afirmó: “Pensamos que nació aquí, tiene todos los derechos, responsabilidades, deberes y privilegios de todos los demás ciudadanos estadounidenses”.

Los responsables fueron encontrados por la Policía luego de otro delito, fueron apresados y se declararon culpables para así evitar la pena de muerte. En la actualidad, están cumpliendo una condena a cadena perpetua sin la posibilidad de la libertad condicional.

El cambio de legislación

Corría el 2009, cuando la familia del joven comenzó a trabajar junto al por entonces presidente de Estados Unidos, Barack Obama, para cambiar la legislación vigente. Así lo hicieron, y existe una ley para la prevención de delitos que se creó en honor a Shepard, pero también a James Byrd, que fue asesinado por su color de piel. Esta medida concluye sanciones a los crímenes de odio por género, discapacidad, entre otros. Además, protege a las personas que son víctimas de acoso por estas razones.

La familia Shepard fundó una asociación homónima que difunde la historia del joven, pretende prevenir los crímenes y trabaja para ayudar a otros en la misma situación.

La película sobre Matt

En el 2002, se hizo una película que reversiona los hechos del caso de Shepard. Para producirla, el equipo viajó para hacer entrevistas a todos los amigos y familiares del joven. La película inicia con los sucesos criminales, y se muestran algunas imágenes reales y otras actuadas por un gran elenco. Asimismo, se incluyeron producciones periodísticas.