Desde el Vaticano, expertos piden garantizar el acceso universal al agua
Junto al Papa Francisco, casi un centenar de personalidades firmarán hoy la Declaración de Roma, en la que pedirán a los gobiernos que aseguren el recurso para las futuras generaciones
Cerca de un centenar de personalidades de todo el mundo bregaron ayer por el acceso universal al “agua limpia, suficiente y potable”, en el marco de un seminario que se desarrolla en el Vaticano y que hoy cerrará el Papa Francisco.
Junto al Sumo Pontífice, los expertos, entre ellos una nutrida delegación argentina, firmarán hoy la denominada Declaración de Roma, para que los gobiernos y la sociedad civil se comprometan a asegurar este recurso a las futuras generaciones.
“Con el cambio climático se altera el ciclo del agua. Y si nos quedamos sin ella, nos quedamos sin vida. Debemos tener un acceso universal, porque es un bien común, y en cambio se nos plantea el problema de su distribución”, planteó el canciller de la Pontificia Academia de Ciencias del Vaticano, Marcelo Sánchez Sorondo, al inaugurar el encuentro “Derecho humano al agua” en la Casina Pío IV, en el edificio del Renacimiento enclavado en los Jardines Vaticanos.
“La primera causa de los problemas que tenemos con el agua es una estructura económica humana basada en el uso de combustible fósil, como el petróleo”, agregó el arzobispo argentino.
Tras resaltar la “importancia” de la encíclica papal Laudato Si’ y de la declaración ambiental conocida como COP21 firmada en París en 2015 como documentos centrales para la discusión, el cardenal brasileño Claudio Hummes planteó en tanto que “el agua es un derecho humano inalienable”.
“Se necesita compromiso, especialmente por los pobres y las generaciones futuras. Es nuestra responsabilidad ética como cristianos asegurarles agua limpia, suficiente y potable”, insistió el purpurado.
“Que la Iglesia no se quede indiferente frente a la grave crisis ecológica y socioambiental. Debemos colaborar en la información y en la formación de la sociedad civil para iniciar un proceso de cambio, porque la Iglesia también puede ayudar a las personas y familias a cambiar su relación con el agua desde sus hogares”, agregó Hummes.
El foro es coorganizado por la Cátedra del Diálogo y la Cultura del Encuentro que dirige el argentino Luis Liberman, quien destacó la posibilidad del evento para “desarrollar una articulación entre el mundo del trabajo y el del conocimiento”.
“Para el tema del agua se requieren políticas públicas. Parece a veces que el Estado se convirtió en sujeto tácito, y en esta crisis que sufre la humanidad el Estado está en disputa”, agregó el cardenal. Por su parte, el gran rabino de Roma Riccardo Di Segni, planteó un recorrido bíblico por la cuestión y recordó que “ya en la Biblia hay conflicto por el agua”.
“Debemos centrarnos en la calidad del agua disponible en el mundo más que en la cantidad”, señaló en tanto el filósofo italiano Gianni Vattimo, que alertó a los 95 participantes del encuentro sobre “las amenazas de las actividades industriales, lo que vuelve necesario centrarnos en el tema de quién contamina el agua”. “Nuestro encuentro debe tener un reclamo de actualidad, preguntarnos dónde están los enemigos del uso natural del agua”, agregó.
Con la firma de la Declaración de Roma, que ocurrirá hoy, se buscará comprometer a los gobiernos y a la sociedad civil “en la construcción de políticas públicas globales, estatales y locales que incorporen instancias de participación reales y efectivas para el ejercicio pleno de la ciudadanía”, según coincidieron los firmantes.