EXCLUSIVO

Dos Argentinas

Mientras el Gobierno nacional y el provincial realizan esfuerzos en la lucha contra la pandemia, Rodríguez Larreta e intendentes de Juntos por el Cambio parecen vivir otra realidad. La doctora Elisa Estenssoro, jefa de la Unidad de Terapia Intensiva del hospital San Martín, le dijo a diario Hoy que, sin intensivistas, “estamos muertos”, además de mostrar su preocupación por “una alta ocupación de camas, con muchos pacientes muy graves”

La doctora platense Elisa Estenssoro, jefa de la Unidad de Terapia Intensiva del hospital San Martín, es una de las profesionales que, junto a sus pares, esta semana pidió a la sociedad que “se cuide y cuide a los demás” a través de una carta abierta y un emotivo video.

En diálogo con diario Hoy, la profesional remarcó la enorme y vital función que cumplen los profesionales intensivistas, ya que tanto los médicos como kinesiólogos y personal de enfermería del área son pocos y tienen la tarea de atender a quienes necesitan de los cuidados más sensibles.

“La situación es muy problemática, estamos en una meseta terriblemente elevada en el AMBA; hay una alta ocupación (de camas), con muchos pacientes muy graves, y esto genera muchísimo trabajo. Antes de la pandemia, los intensivistas ya éramos pocos. La cuarentena fue una buena medida, una herramienta apropiada para frenar la circulación. Esto dio tiempo para la adquisición de muchos insumos necesarios y también se nombró personal, pero no hay muchos para cuidados críticos; no había más gente disponible”, señaló Estenssoro.

A la vez, miles de profesionales de la salud resultaron contagiados, internados, y 58 trabajadores del área fallecieron como consecuencia de la Covid-19 en la Provincia de Buenos Aires.

“La pandemia empieza con su propia dinámica, el virus se mueve como resultado de la circulación de la gente. El 5% de los pacientes internados van a terapia intensiva, eso nos encuentra a los intensivistas con altísimo trabajo. Tenemos el doble de camas que antes, con pacientes que están mucho tiempo, y eso hace que no puedan entrar nuevos; no responden bien al tratamiento y hay que hacer ajustes. Además es complicado ponerse y sacarse el equipo de protección; eso generó enojo, cansancio, temor a enfermarse y contagiar a la familia”, remarcó.

Responsabilidad social

Mientras, la comunidad médica le pide a la población cuidarse y respetar las medidas básicas de higiene y aislamiento. Eso los llevó a publicar la carta abierta en la que solicitaron respetar esas medidas. Estenssoro dijo al respecto: “Vemos que parte de la sociedad no acompaña en esto de disminuir los contagios”.

“La respuesta de la sociedad fue dual, hay gente que reconoce el trabajo y otra parte que quiebra todas las normas y no guarda la distancia, no usa el barbijo o lo hace mal, se aglomera; es una invitación al contagio. La respuesta de esa parte de la sociedad es muy poco satisfactoria y muy poco responsable. Jamás pasó esto de tener que pedir que se cuiden así. Pasamos la pandemia del H1N1, que también fue mortal, pero los contagios del Sars-Cov-2 no son iguales, la situación es muy diferente”, dijo la especialista.

Según las tendencias de los virus y las enfermedades más fuertes de las últimas décadas, desde la comunidad médica ven que se repiten cada siete años, aproximadamente, por lo que es posible que algo como lo que provocó el coronavirus vuelva a ocurrir.

“Vamos a ver qué pasa con los profesionales. Tiene que haber una educación para la población y en las autoridades la percepción de que quienes trabajan en terapia intensiva son indispensables. Deben existir políticas que estimulen a los jóvenes a elegir esta especialidad, de lo contrario estamos muertos”, concluyó.

Noticias Relacionadas