El arreglo de una zanja terminó en una odisea

Ayelén Borré vive en la calle 600 de La Plata. Una zona en la que hace mucho tiempo hay problemas con el suministro de energía y de agua.

Ayer, tres hombres de una empresa constructora de Florencio Varela se acercaron hasta la puerta de su domicilio ubicado a la altura de 207 entre 115 y 116 y le avisaron que iban a romper la vereda para iniciar una obra de ampliación de la zanja.

A los pocos minutos, como consecuencia de los trabajos, un caño de agua empezó a despedir agua para arriba, provocando la sorpresa de los vecinos y los trabajadores, que con las herramientas, palas y picos, terminaron rompiendo la cañería en el lugar.

Lejos de reparar lo hecho, los hombres se retiraron del lugar, dejando la vereda rota y el agua saliendo, mientras que los vecinos no salían de su asombro por lo que estaba ocurriendo.

“Venían a arreglar el tema de la zanja y terminaron inundando todo el barrio”, comentó Ayelén, quien hizo el correspondiente reclamo a ABSA.

Al parecer, los trabajadores no estaban autorizados para tocar los caños de agua que le corresponden a la empresa ABSA y tras romper involuntariamente la cañería se fueron del lugar y dejaron el problema.

Tras varias horas sin agua en las canillas, pero con agua ingresando desde la vereda a las casas, una cuadrilla de ABSA se acercó al lugar cerca de las 16 y frenó la pérdida.

“Nos dijeron que mañana venían a arreglar todo este desastre que hicieron. Pero mientras tanto varios vecinos se quedaron sin agua”, comentó la vecina de 600 entre 115 y 116.