Humanos y neandertales comenzaron a vincularse mucho antes de lo que se pensaba

Un estudio reciente ha arrojado nueva luz sobre la interacción entre los neandertales y los Homo sapiens, sugiriendo que su contacto comenzó mucho antes de lo que se pensaba. Hasta ahora, se creía que estas dos especies se habían cruzado hace menos de 75.000 años. Sin embargo, la investigación publicada en Current Biology revela que una población de Homo sapiens de África se encontró con los neandertales en Eurasia hace 250.000 años. Aunque este grupo humano se extinguió, dejó una marca del 6% de su genoma en el ADN humano.

Además, se ha descubierto ADN de Neandertal en algunas poblaciones de humanos modernos del África subsahariana, indicando que algunos de los humanos que se cruzaron con estos homínidos regresaron al continente africano.

Los científicos realizaron el estudio comparando el genoma del “Neandertal de Altai” de Siberia, con 122.000 años de antigüedad, con los de 180 personas de 12 poblaciones modernas del África subsahariana.

Los resultados revelaron que todos los genomas subsaharianos estudiados contenían ADN de Neandertal, la mayoría proveniente del evento de intercambio genético hace 250.000 años. Algunas poblaciones incluso presentaban hasta un 1,5% de su genoma compuesto por ADN de Neandertal, heredado de humanos que habían regresado a África.

Además, se encontró que la mayor parte del ADN humano en el genoma de Neandertal se encontraba en regiones no codificantes, sugiriendo que los genes humanos fueron seleccionados en contra durante la evolución de los neandertales. También se observará la ausencia de ADN de Neandertal en los genomas humanos en las mismas áreas.

En una investigación paralela, científicos de la Universidad de Ginebra analizaron la distribución del ADN heredado de los neandertales en los genomas de Homo sapiens en los últimos 40.000 años. Los resultados revelaron sutiles diferencias geográficas en la presencia de ADN neandertal, lo que refleja dinámicas demográficas y eventos migratorios de la época.

Es este un avance revolucionario en la comprensión de la interacción entre Homo sapiens y neandertales proporciona un contexto invaluable para la historia de nuestra evolución y promete desentrañar más sobre cómo el legado genético neandertal ha influido en nuestra diversidad genética, morfología, comportamiento y susceptibilidad a ciertas enfermedades.